Investigadores de Sudáfrica han identificado una nueva variante del SARS-CoV-2 con una gran cantidad de mutaciones, más del doble que otras muy contagiosas como la delta, aunque, por el momento, la OMS no la considera ni una "variante preocupante" ni una "variante de interés".
El Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica (NICD, en sus siglas inglesas) anunció hoy la identificación de una nueva variante del coronavirus muy mutante detectada originalmente en este país, si bien se ha hallado también en otras naciones.
La variante, denominada "C.1.2", se identificó por primera vez el pasado mayo en dos provincias sudafricanas, Gauteng (donde están Johannesburgo y la capital, Pretoria) y la vecina Mpumalanga, aunque ya se ha descubierto en las nueve provincias del país austral.
La "C.1.2", que se ha encontrado igualmente en naciones como Nueva Zelanda, Mauricio, Portugal o Suiza, comparte algunas mutaciones con otras variantes, como la delta (originada en la India) o la beta (surgida el año pasado en la propia Sudáfrica), pero presenta otras únicas.
Según indicó hoy en una rueda de prensa telemática la científica del NICD Cathrine Scheepers, la nueva variante presenta "hasta 59 mutaciones, que son muchas", si se toma en cuenta que otras variantes suelen tener "alrededor de 25".
De momento y pese a su capacidad de mutación, la "C.1.2" no es ni una "variante preocupante" ni una "variante de interés", según el criterio clasificatorio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), porque se ha detectado con una "frecuencia baja", explicó en la rueda de prensa virtual la doctora Jinal Bhiman, del NICD.
Sobre si la nueva variante es más transmisible que otras, Scheepers respondió: "ahora mismo no lo sabemos", pues los científicos continúan haciendo experimentos para averiguar más de ella.
"Según nuestro conocimiento de las mutaciones en esta variante, sospechamos que podría evadir parcialmente la respuesta inmune, pero a pesar de esto, las vacunas seguirán ofreciendo altos niveles de protección contra la hospitalización y la muerte", subrayó el Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles en un comunicado.
El profesor Adrian Puren, del NICD, subrayó en la rueda de prensa que las vacunas usadas actualmente en Sudáfrica, como las de las empresas farmacéuticas Johnson & Johnson y Pfizer, resultan "efectivas" ante la "C.1.2", por lo que no hay motivo para entrar en "pánico".