El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha reconocido este jueves que Madrid y Cataluña, que aglutinan entre las dos la mitad de nuevos casos de coronavirus en España arrancan de "un punto de partida más complicado" para iniciar la desescalada. "Es posible que se retrase la toma de medidas en estas dos, aunque no tiene por qué ser así", ya que todo dependerá de la evolución de la epidemia, ha explicado Simón en la rueda de prensa telemática.
Lo cierto es que "ahora mismo están en una situación de epidemia mucho mayor" que el resto, ya que ambas han notificado 668 nuevos casos (406 Madrid y 262 Cataluña) de los 1.309 nuevos contabilizados hoy, por lo que "su punto de partida es un poco mas complicado que el de otras". Sin embargo, en todas, también en ellas, la evolución de la epidemia "es muy rápida hacia abajo".
Paradójicamente, Madrid, Málaga, Zaragoza, Palma de Mallorca, Sevilla y Barcelona, por este orden, son las ciudades españolas que más han respetado el confinamiento, según un estudio elaborado por firma de geolocalización y Big Data Satya Insights.
Después de que Galicia -que ayer notificó positivos confirmados por test de anticuerpos que Sanidad no tiene en cuenta para hacer su balance de evolución-, haya "actualizado y validado" sus datos consolidados de casos confirmados mediante PCR, el Ministerio ha calculado en 213.435 de positivos detectados con esta prueba desde el inicio de la crisis sanitaria. De ellos, 39.987 son profesionales sanitarios, el 18,7 % de los infectados.
Con este nuevo aumento, el ritmo con el que ha avanzado el virus en 24 horas se sitúa en un 0,6 %. La incidencia acumulada en los últimos 14 días en toda España es de 78,87 contagios por cada 100.000 habitantes, aunque las cifras son muy dispares atendiendo a las comunidades autónomas.
Así, hay seis donde la incidencia es muy "favorable", por debajo del 20 %: Andalucía, Asturias, Canarias, Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia, además de Ceuta y Melilla. En todas, el coronavirus ha ralentizado su ritmo en 24 horas por debajo del 1 %, a excepción de Cantabria (1,3 %), Castilla y León (1,2 %) y Aragón (1 %). Y todas han notificado más altas que infecciones, menos Castilla y León y Madrid.
Desde la víspera, otras 816 personas han sido hospitalizadas, pero más de la mitad de concentran de nuevo en Madrid, con 226, y Cataluña, con 217, seguidas de Castilla y León, con 103. Muy lejos quedaría ya Castilla-La Mancha con 44. El total de hospitalizaciones es de 116.661.
Los que han requerido cuidados intensivos se sitúan en 10.776 y, de ellos, 57 en las últimas 24 horas; de éstos, 22 han sido ingresados en ucis madrileñas y 16 catalanas. Las dos Castillas han contabilizado cuatro cada una, mientras que cinco comunidades -Andalucía, Aragón, Asturias, Canarias y Cantabria-, además de Ceuta y Melilla, han registrado cero.
Simón ha celebrado que la cifra de 268 nuevos fallecidos -que en total ascienden a 24.543- sea la menor registrada desde que la curva comenzó a subir el pasado 20 de marzo, cuando se contabilizaron 235; y la segunda más baja de los últimos días, en los que el número de víctimas mortales se ha movido en el rango bajo de los 300 diarios.
Diez comunidades -Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Extremadura, Galicia, Murcia, Navarra y la Rioja- y Ceuta y Melilla han informado que no han registrado ninguna defunción. "Comparado con semanas anteriores -cuando superaban los 500-, bajamos incluso más deprisa de lo que podíamos esperar", ha dicho el epidemiólogo. Con este cómputo, España ha pasado a cuarto país del mundo con más muertos por coronavirus, superado ya también por Reino Unido, además de Italia y Estados Unidos.
Mientras, los curados duplican largamente a los nuevos casos con otras 3.103 personas que han logrado superar la enfermedad, que elevan el total a 112.050, un 52,4 %. Pese a ello, el experto ha hecho un llamamiento a "valorar con mucha precaución" datos que invitan al optimismo, no porque vaya a haber "pasos atrás en este momento, sino porque puede llevarnos a una euforia que genere problemas más adelante", ha advertido.
El reto ahora está en, "dentro de la euforia contenida", conseguir mantener esta evolución en los próximos meses porque "estamos en un riesgo importante de tener nuevos brotes epidémicos que tendrían un impacto excesivo" en el sistema sanitario y en toda la población, ya que implicaría "pasos atrás" en la desescalada.
De hecho, Simón ha desaconsejado que nietos y abuelos puedan abrazarse tras los primeros alivios del confinamiento: "Ahora mismo, en nuestra situación y con los niveles de transmisión que tenemos en España y con la epidemia que hemos vivido, tenemos que ser conscientes de los riesgos que puede suponer no para el niño, sino para su propio abuelo", ha avisado.
Antes de que los adultos también puedan salir a pasear y a practicar deporte el próximo sábado en unas condiciones que detallará esta tarde el ministro de Sanidad, Salvador Illa, de momento el Gobierno ha emitido una orden que entra en vigor hoy para permitir actividades en los huertos individuales, otra de las medidas de alivio de la desescalada.
Un proceso en el que se partirá de la provincia como unidad básica, aunque Illa ha mostrado la flexibilidad del Ejecutivo para estudiar las propuestas de las comunidades autónomas, siempre y cuando ese territorio sea fácilmente aislable en caso necesario.
Sobre la petición de Baleares de que también Ibiza y Menorca puedan empezar la fase I de la desescalada el lunes, Simón ha recordado que las comunidades tienen la opción de proponer territorios diferentes a la provincia, que es la unidad básica de partida, "siempre y cuando esté justificado desde todos los aspectos" de movilidad, sanitarios y de evolución de la epidemia y la capacidad de darle respuesta.
"Las comunidades reflejan la posición de la población: todos queremos volver cuanto antes a una posición favorable, pero debemos tener cuidado, valorarlo con mucha precaución y garantizar que se cumplen todos los requisitos para no tener una recaída que pueda ser incluso más catastrófica", ha alertado.
El epidemiólogo ha insistido en que la transmisión del coronavirus "va claramente hacia abajo y además a una velocidad muy rápida" y ha recalcado que "los datos vienen con cierto retraso, y eso significa que la situación actual es bastante mejor que lo que nos indican estos datos". Pese a ello, ha advertido de que sigue habiendo casos infecciosos que pueden transmitir y, según su información, el punto clave en los contagios se ubica "donde están los pacientes", es decir, en los centros sanitarios y en una proporción mínima en los domicilios.
Respecto las residencias de mayores, Simón ha detallado que los casos que se reportan desde estos establecimientos son antiguos, sin que se pueda identificar cuando tuvieron una infección sintomática o asintomática y desarrollaron defensas, "por lo que ahora no es un foco principal", ha destacado.