Suspendidos todos los eventos en Alemania, al menos, hasta finales de octubre. Es una medida de urgencia, después de los rebrotes de coronavirus detectados en el país. 70 vecinos de un barrio de Berlín y 657 empleados de una empresa cárnica de Renania han dado positivo en las últimas horas.
De la fábrica donde se ha producido el brote sale el 20 por ciento de los productos cárnicos de Alemania. Es la más grande de Europa.
Recientemente habían hecho pruebas a 6.400 personas y sólo había ocho casos positivos, pero ahora, en 800 pruebas más ya van por 600 positivos.
En la fábrica dicen que son trabajadores recién llegados de sus países, en Europa del Este, después de pasar un puente.
De momento el confinamiento obliga a encerrarse a todos los empleados y como precaución se han cerrado colegios y guarderías próximos. Sin embargo, la cuarentena no afecta al resto de los 100.000 habitantes de Guetershloh, en Westfalia.
Los sindicatos recuerdan ahora las condiciones de hacinamiento en las que viven esos trabajadores del Este de Europa pero también apuntan a la facilidad con la que el virus parece transmitirse con el frío, dentro de las cámaras refrigeradas donde el frío puede ayudar a que pase de una persona a otra.
Pero no es este el único rebrote que preocupar en Alemania. En un barrio de Berlín, se han detectado 70 vecinos infectados. Donde el virus parecía más controlado empieza a resurgir.