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España encabeza el ranking de casos de la viruela del mono, la infección vírica zoonótica que ya ha sido detectada en nueve países de todo el mundo. En total, los casos registrados a nivel mundial ya superan los 80, y hay decenas de posibles casos en estudio.
En España ya habría al menos 30 casos de viruela del mono confirmados, todos ellos en Madrid, mientras que otros 15 siguen en estudio como sospechosos. Galicia por su parte ha informado de que se ha detectado el primer caso sospechoso, al igual que Extremadura, País Vasco y Canarias, con un caso que se está analizando.
En segundo lugar se encuentra el país vecino Portugal, que ya ha detectado 23 casos confirmados. Reino Unido ocupa la tercera posición del ranking de casos de esta afección. La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) informaba este viernes de que los últimos casos detectados elevan a 20 los afectados por la viruela del mono, desde que se declara la alerta el pasado 6 de mayo. Asimismo, han advertido de que esperan que el número continúe aumentando en los próximos días.
La viruela símica apareció por primera vez en los seres humanos en 1970 en la República Democrática del Congo (denominada en aquel entonces Zaire) en un niño de nueve años, en una región en la que la viruela se había erradicado en 1968.
Desde entonces, la mayoría de los casos notificados proceden de regiones rurales de la selva tropical de la cuenca del Congo y el África occidental, en particular de la República Democrática del Congo, donde se considera endémica. En 2017, Nigeria sufrió el mayor brote documentado, aproximadamente 40 años después de los últimos casos confirmados.
En la primavera de 2003 se confirmaron casos de viruela símica en los Estados Unidos, siendo la primera vez que se detectó la enfermedad fuera del continente africano. La mayoría de los pacientes había tenido un contacto estrecho con perros de la pradera domésticos que habían sido infectados por roedores africanos importados al país.
El periodo de incubación (intervalo entre la infección y la aparición de los síntomas) de la viruela símica suele ser de seis a 16 días, aunque puede variar entre cinco y 21 días. Además, suele ser una enfermedad autolimitada con síntomas que duran de 14 a 21 días. Los casos graves se producen con mayor frecuencia entre los niños y su evolución depende del grado de exposición al virus, el estado de salud del paciente y la gravedad de las complicaciones.
Según la OMS, la tasa de letalidad ha variado mucho en las distintas epidemias, pero ha sido inferior al 10% en los eventos documentados. La mayoría de las defunciones se producen en los niños pequeños y, en general, los grupos de edad más jóvenes parecen ser más susceptibles, indica.