La exministra de Sanidad Ana Pastor, ha advertido de que hay un problema socio sanitario de personas mayores polimedicadas "impresionante" y "toman hasta tres fármacos para lo mismo", por lo que ha pedido una mayor sensibilización sobre los efectos de las medicinas.
Así lo ha manifestado este martes la exministra de Sanidad, Ana Pastor, que ha participado en la mesa redonda, “Perspectivas institucionales y de gestión en políticas de salud mental y dolor”, en el curso "Salud mental y dolor: enfoques actuales para la atención integral" en San Lorenzo de El Escorial (Madrid).
Según la exministra, "tenemos un problema socio sanitario de personas mayores polimedicadas impresionante" y "si ven el numero de fármacos que toman los pacientes se quedarán sorprendidos porque toman hasta tres fármacos para lo mismo".
Ha manifestado que las personas toman varios medicamentos juntos sin saber sus efectos, antes de insistir en que los médicos tienen que sensibilizar a los pacientes sobre sus efectos.
"Nadie les ha explicado que a un paciente anciano de baja movilidad no hay que darle una benzodiacepina de vida media larga porque sino se rompe la cadera", ha alertado la exministra, al destacar que "hay muchas alternativas que pueden resolver algunos problemas, no todo lo resuelven los fármacos".
En cuanto al dolor, ha hecho hincapié en la falta de equidad en el acceso a la Unidad de Dolor según el territorio y ha defendido que "un paciente viva donde viva, esté donde esté y tenga la renta que tenga, pueda acceder a una unidad que trate específicamente su problema".
Para solucionar esa desigualdad, ha propuesto una cartera común de servicios y desarrollar protocolos de salida y entrada de la Unidad de Dolor porque cree que si no se manda a los pacientes un mensaje equivocado,"tenemos que transmitir que hay un tiempo de expectativa y que va a salir de ahí".
Según la exministra, "el dolor no se puede tratar de forma aislada" porque es signo de que "hay detrás más cosas que una patología física", por lo que ha defendido la importancia del trabajo intersectorial en la administración y la formación de los profesionales en la relación entre la salud mental y el dolor.
Por otro lado, ha afirmado que la salud mental y el dolor son asignaturas pendiente y dos problemas que están interelacionados: "no hay nada peor que vivir con dolor".
Sobre la salud mental, la exministra ha apostado por cambiar el estigma sobre este tema y aumentar la inversión en prevención, clave para afrontar estos problemas.
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