Las rutinas de limpieza facial - conocidas como 'skincare' - son cada vez más demandadas en plataformas de contenido juvenil como TikTok. Es habitual encontrar vídeos donde chicas jóvenes, influencers o no, muestran los productos que utilizan para tratarse la piel antes de irse a la cama (o bien, al comenzar la actividad de la mañana). Lo llamativo de esta rutina es que, tal y como alertan las industrias farmacéuticas, las adolescentes están utilizando productos antiage, como el ácido hialurónico y el colágeno, que "no se corresponden con su edad temprana" y, por ello, están reportando casos de dermatitis, alergias e, incluso, quemaduras en la piel.
"Es probable que el manto lípido de la adolescente se vea afectado por principios activos anti-edad, como el ácido retinóico, conocido por su efecto rellenador de arrugas, y cuyo uso continuado se relaciona con irritación y dermatitis. Lo mismo puede ocurrir con sustancias o exfoliantes químicos, como los ácidos kójico, glicólico, láctico y azeláico, que pueden promover la irritación", explica la profesora de farmacología y productos demofarmacéuticos y cosméticos, Laura Redondo, a Informativos Telecinco.
Y advierte: "Estos efectos ocurren porque sus pieles no están preparadas para la utilización de esos productos cosméticos, ya que cada etapa cronológica supone unas necesidades distintas. Así, se genera una respuesta por parte de la piel del paciente a esta agresión producida por los agentes externos pudiendo cursar con irritación o con una mayor producción de sebo, al estar retirando este sebo con cosméticos inadecuados".
La edad cronológica de la piel a la que se refiere la experta es la siguiente: en cuanto a la utilización de cremas hidratantes, las recomendaciones indican que "pueden utilizarse a partir de los 20-25 años", predominando los ingredientes activos capaces de atraer el agua hacia la epidermis y retenerla. Y, en cuanto a los tratamientos anti-edad, se recomienda la utilización de ingredientes activos antienvejecimiento a partir de los 30-35 años, cuando "el perfil hormonal puede comenzar a modificar el contenido del manto hidrolipídico de la piel o la dermis puede comenzar a perder elasticidad y firmeza".
Por tanto, las recomendaciones generales son sencillas: "Durante la adolescencia, el único cuidado que debe darse a una piel sana, sin tratamientos para afecciones dermatológicas específicas como acné grave, rosáceas o dermatitis, es la limpieza con jabones suaves. Como complemento, si ese jabón resultara muy secante para esa piel en concreto, podría aplicarse una leve hidratación con cremas ligeras, compuestas por ingredientes activos no comedogénicos, que permitan balancear de nuevo ese manto hidrolipídico que nos protege de agentes externos", concluye Laura.