Las moscas negras son insectos pequeños pero tremendamente molestos debido a su capacidad para causar mordeduras dolorosas y prurito intenso, las cuales pueden convertir cualquier actividad al aire libre en una experiencia bastante incómoda y desagradable. Este insecto se ha estado expandiendo por varias zonas de España y ha aumentado su población debido a la subida de las temperaturas en los últimos años, según ha alertado la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla).
A pesar de que las especies en España, por regla general, no suelen transmitir enfermedades como otros mosquitos, algunas especies en el mundo sí que actúan de vectores para enfermedades graves, como la oncocercosis en África, la segunda causa de ceguera infecciosa mundial. De todos modos, en este artículo te explicamos qué debes hacer si te muerde una mosca negra y cómo prevenir sus ataques.
Lo primero que hay que saber es que la mosca negra no pica, sino que muerde con su boca en forma de sierra. Esto produce una herida que puede sangrar y que se inflama rápidamente. Además, la saliva de la mosca negra contiene sustancias anestésicas, lo que hace que no notemos la mordedura en el momento, pero sí sus efectos posteriores.
Los síntomas más comunes de la mordedura de la mosca negra son:
Si te muerde una mosca negra, lo primero que debemos hacer es limpiar bien la herida con agua y jabón o con algún producto antiséptico, para evitar que se infecte y reducir el riesgo de complicaciones. Después, podemos aplicar hielo para disminuir la inflamación y el dolor. También podemos usar pomadas emolientes o calmantes para aliviar el picor y evitar el rascado. No debemos arrascarnos ya que podemos provocarnos infecciones.
En caso de que la hinchazón no remita o que aparezcan síntomas de alergia, como hinchazón en la cara o labios, dificultad para tragar, voz ronca, o dificultad para respirar, debes acudir al médico cuanto antes para que te valore la gravedad de la reacción. Así, podrá recetarte algún medicamento, como antiinflamatorios, antihistamínicos o corticoides. En algunos casos, puede ser necesario administrar antibióticos o antiparasitarios si hay sobreinfección o transmisión de alguna enfermedad.
Para prevenir las mordeduras de la mosca negra, lo mejor es evitar las zonas donde abunda este insecto, sobre todo en las horas de mayor actividad, que son el amanecer y el atardecer cerca de ríos y pantanos. También se recomienda usar ropa de manga larga, botas, calcetines y pantalón largo, así como repelentes de insectos en la piel y en la ropa. Estos deben contener DEET (dietiltoluamida) a altas concentraciones (> 45%), según señalan desde la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES). Además, se aconseja colocar mosquiteras en las ventanas y puertas para impedir su entrada en el hogar.
La mosca negra es un insecto molesto y peligroso que puede arruinar nuestro descanso de verano, e incluso puede poner en riesgo nuestra salud. Por ello, es importante seguir estos consejos para protegernos de sus mordeduras y actuar rápidamente en caso de que nos ataquen.