La mosca negra es cada verano habitual en Madrid, sin embargo, este año está habiendo más. La mayoría de urgencias son por sus picaduras, explica la doctora María del Mar Copano, que trabaja en un centro de salud. La doctora advierte que la picadura "duele mucho" y que muchas veces hay que pinchar urbason. Lo mejor es usar un buen repelente.
Las últimas dos o tres semanas ha habido muchas picaduras de mosca negra, ha explicado la doctora Copano, médico en el centro de salud de San Martín de la Vega, en Madrid. Esta mosca suelen estar en las zonas verdes, con mucha vegetación o piscinas con césped y árboles.
La mosca negra hace unas “picaduras tremendas” pero no pican, “duelen mucho. Para mí es como una mezcla entre garrapata y mosca" porque “muerde y chupa la sangre”. El insecto clava el habón y provoca una "ampolla enorme", afirma Copano.
“Hace unos días” –cuenta- “vino una madre que le había quitado tres moscas a su hijo del cuello”. El insecto se queda ahí clavado muchas veces.
Al principio parece una picadura normal pero al día siguiente suele ponerse peor. “Hay que aplicar hielo y agua fría y poner el brazo o la pierna en alto”. Si son grandes, la doctora pauta un antihistamínico.
Si la picadura es muy grande y dolorosa, hay que recurrir al urbason. “A algún paciente le hemos tenido que pinchar más una vez”. En dos o tres días se suele pasar.
La picadura en si no supone ningún peligro para la salud, como otros insectos. Sin embargo, si la herida se infecta la picadura puede complicarse.
La forma de prevenir la picadura de la mosca negra es con un buen repelente. Nada de un producto de supermercado, siempre de farmacia y si es hecho por ellos mismos mejor, explica la médico.
Una vez que ha picado hay que poner hielo y agua fría. Si duele mucho, insiste la doctora Copano, se debe acudir a urgencias.