Una relación sana no siempre es sencilla de tener, sobre todo cuando a nuestro alrededor existen personas que emplean determinadas tácticas, como sucede con el ‘cookie jarring’. Esto se aleja bastante de lo que se entiende por tener una relación saludable, porque hace referencia a seguir ligando con personas a pesar de tener pareja.
Como sucede con otros conceptos que han ido ganando popularidad gracias a las aplicaciones de búsqueda de pareja, este hace tiempo que existía, pero cada vez es más habitual. Parece que a través de las redes sociales los comportamientos son muy diferentes de los que tendíamos cara a cara y esto nos deja actuaciones muy negativas, y también secuelas.
Esto es lo que sucede con el ghosting, esos casos en los que no se vuelve a saber nada de una persona y sucede sin explicaciones ni avisos previos, una actitud tóxica que puede llegar a suponer un problema de autoestima en quien lo padece. Aunque lo asociamos a las relaciones sociales, estos gestos también se producen en otros ámbitos de la vida, como el laboral.
El término ‘cookie jarring’ hace referencia a la necesidad que se siente de saber que hay más galletas esperándonos en la caja a pesar de estar comiéndonos una. Este sentimiento es el mismo que tienen las personas que no dudan en tontear con varias a pesar de tener un compromiso previo. Esto se hace para tener un ‘repuesto’ en caso de que la relación actual no funcione (tener la tranquilidad de que queda una galleta extra por si entra hambre después).
Esta práctica no solo es engañosa para la persona que está en la relación, que puede sentir como su pareja se salta los acuerdos a los que habían llegado, también para el tercero en discordia. Esta persona está invirtiendo tiempo y también emociones en alguien que no está haciendo lo mismo.
Puede ser un signo de falta de compromiso emocional o una incapacidad de establecer relaciones significativas, también puede deberse a una baja autoestima o una gran inseguridad. Este fenómeno esconde la necesidad de sentirse validado de manera constante y también puede estar relacionado con el miedo a la soledad. Buscar un plan B en la relación también puede ser consecuencia de una insatisfacción por la relación en la que se está actualmente.
El objetivo del tonteo o coqueteo es llamar la atención de la otra persona, logrando así una interacción social, no siempre el objetivo es sexual. En las personas con pareja puede darse por una insatisfacción personal, pero también por buscar una sensación novedosa que en la relación se ha perdido o por la cultura de la inmediatez, donde solo se busca la satisfacción en el momento, evitando el compromiso.
Conviene señalar que, para muchas personas, un coqueteo fuera de la relación no se considera infidelidad, por eso la comunicación es básica en este y en todos los casos. Estar de acuerdo en los límites de la relación puede evitar grandes quebraderos de cabeza en el futuro.