La psicosis puede afectar a personas de todas las edades y condición. Reconocer los síntomas tempranos es clave para abordar un episodio de este tipo, ya que de lo contrario las consecuencias pueden ser mucho peores. ¿Qué es y qué debes conocer sobre este trastorno?
En España hay 1,4 millones de personas que sufren trastornos psicóticos, lo cual equivale al 3 por ciento de la población. En la mayoría de los casos, los episodios aparecen desde la adolescencia y antes de los 30 años.
Los brotes psicóticos causan un profundo impacto tanto en la persona que lo sufre como las personas que son testigo. Lo que caracteriza a la psicosis es la pérdida del sentido de la realidad, aunque hay varios niveles de síntomas, algunos difíciles de reconocer a menos que conozcamos el trastorno.
Podemos definir la psicosis como una enfermedad mental caracterizada por delirios o alucinaciones, como la esquizofrenia o la paranoia, pero como decimos puede manifestarse de varias maneras. La palabra psicosis se utiliza para definir cualquier trastorno que afecta a la mente.
Los episodios psicóticos o brotes aparecen cuando una persona “enferma” y se alteran los pensamientos y las percepciones. Entonces aparecen los síntomas que debemos reconocer:
Las causas pueden ser muchas. Desde un factor genético hasta la aparición repentina por motivos médicos, o como respuesta al estrés o la ansiedad. También puede estar causada por el uso de algunos medicamentos, del alcohol o las drogas, incluso las “blandas” como la marihuana.
Cuanto antes se trata la psicosis, más probabilidades tendremos de recuperarnos del todo. El tratamiento suele requerir de un psicólogo, un psiquiatra o un trabajador social, o todos ellos en conjunto.
Las personas con psicosis a veces pueden necesitar supervisión porque su comportamiento es impredecible y pueden volverse violentas, o pueden autolesionarse.
Suele ayudar la psicoterapia individual o en grupo; el apoyo familiar y educación de los familiares o la pareja que convive, para tratar sin estigma y con sensibilidad el trastorno; hay medicamentos que ayudan a controlar los brotes psicóticos, y es importante favorecer el apoyo social y la inserción, para que la persona pueda tener una rutina y hacer una vida normal y productiva.