Un niño se llevó un susto tremendo al quedar colgado de la cabeza de los barrotes de una ventana en un edificio muy alto en China. El menor quedó atrapado entre los hierros y su cuerpo estuvo suspendido en el aire, solo sujeto por la cabeza a los barrotes. Entre el padre y un agente de la policía consiguieron sacarlo tras varios minutos muy angustiosos.
A los niños pequeños no hay que perderlos de vista ni un segundo, y a partir de ahora los padres de este menor en China lo van a tener grabado a fuego. El niño quedó se enganchó la cabeza en los barrotes de una vivienda en China y se vivieron unos minutos de tensión al quedar suspendido a una gran altura y estar solo sujeto por la cabeza.
El niño no paraba de llorar y la policía local acudió con mucha rapidez para poder rescatar al menor, al que su padre tenía agarrado. Entre un agente de la policía y el padre consiguieron girarle para poder sacar su cuerpo por los barrotes y que pudiese entrar en la vivienda de nueva. El menor no dejó de llorar por el susto, pero por suerte hubo final feliz.
Aunque parezca extraño por la gravedad del suceso, el niño salió totalmente ileso y no sufrió ningún daño, ‘solo’ el sofocón que se llevó durante unos minutos. Dentro de unos años, el niño podrá contar la travesura que hizo cuando era pequeño y lo mal que lo pasaron sus familiares y sus vecinos.