El coronavirus no entiende de edades. Aunque, desde que comenzó la pandemia las personas mayores fueron las grandes afectadas, no hay que olvidar que también afecta a los jóvenes y que estos no están libres de fallecer por esta infección. Esto es algo que una familia de Argentina ha aprendido a base de dolor.
En la ciudad de Concordia, en Entre Ríos, la tragedia ha sacudido a una familia. Aldana, de 21 años y Marina, de 29, fallecieron por coronavirus con solo nueve días de diferencia. Uno de sus hermanos, Alfredo, cuenta cómo sucedió todo: "No sabemos cómo nos contagiamos: fue de repente. De un día para el otro, todos empezamos a tener síntomas", asegura.
Toda la familia se contagió, desde la abuela de 90 años hasta las más jóvenes. Aldana, que estudiaba el primer año del Profesorado de Biología en el Instituto de Profesorado 'Concordia', fue la primera en fallecer a los 21 años, el pasado 2 de mayo.
Pero la cosa no quedó ahí, solo nueve días después, el coronavirus se cobró la segunda víctima de la familia. La mayor de las hermanas, Marina, madre de un niño de 12 años y de una niña de 6, también falleció. Su estado de salud había evolucionado bien, pero desde la muerte de Aldana comenzó a empeorar y finalmente murió, como recoge Infobae.
Según defiende la familia, ninguna de ellas padecía enfermedades graves, pero Aldana tenía sobrepeso y Marina hipertiroidismo. Una tragedia que ha roto a esta familia argentina, que no sabe cómo va a continuar con estas dos pérdidas. La madre de las jóvenes, Mariela, ha tenido que ser internada tras la grave crisis que sufrió al enterarse del fallecimiento de dos de sus hijas.