Noticia triste para los Obama. Bo, el célebre perro de aguas portugués que acompañó a la familia presidencial durante dos mandatos, ha fallecido a los doce años de edad por un cáncer. El matrimonio ha anunciado la muerte de su fiel mascota a través de las redes sociales y ambos han elogiado el carácter bonachón del animal.
"Durante más de una década, Bo fue una permanente presencia amable en nuestras vidas", ha añadido Barack Obama en un tweet. Bo fue un regalo al expresidente en 2009 del entonces senador de Massachusetts Edward Kennedy. La mascota protagonizó todo tipo de anécdotas durante su estancia en la Casa Blanca, aunque lo más recordado fue el plan para secuestrarlo en 2016 junto al otro perro de la familia, Sunny, una trama que acabó con la detención de un individuo que tenía armas y municiones en su camioneta y que aseguraba ser hijo de John F. Kennedy y Marilyn Monroe.
La alegría canina volvía a la Casa Blanca después de que durante el mandato de Donald Trump no hubiese presencia de perros en la casa del mandatario estadounidense, pero lo alegría de los amantes de los animales ha durado poco.
Los dos perros de Joe Biden tuvieron que abandonar la Casa Blanca por el comportamiento agresivo de uno de ellos. Según informaba la cadena estadounidense CNN, el más joven de los pastores alemanes, Major, mordió a un miembro del equipo de seguridad del presidente. Esto habría obligado a trasladar a las mascotas a la residencia que los Biden tienen en Delaware.
Preguntada por lo ocurrido, una portavoz de la Casa Blanca se ha limitado a decir que los perros son parte de la familia Biden, que suelen acompañar a la primera dama cuando viaja y que aún están adaptándose a su nuevo hogar en Washington.