El agente de la Policía de Mineápolis Derek Chauvin ha sido declarado este martes culpable de todos los cargos por asesinato de los que había sido acusado por la muerte del ciudadano afroamericano George Floyd, tras diez horas de deliberación del jurado del tribunal del condado de Hennepin, en Minesota.
Los doce integrantes del jurado popular han señalado que Chauvin es culpable de asesinato involuntario en segundo grado, de asesinato en tercer grado y de homicidio en segundo grado por la muerte de Floyd en mayo de 2020, cuando presionó con su rodilla el cuello de la víctima durante más de nueve minutos. Tardaron 10 horas en tomar la decisión.
La condena por homicidio involuntario en segundo grado es una pena de prisión de no más de 40 años, mientras que la de asesinato en tercer grado le puede suponer otros 25 años como máximo entre rejas. La sentencia por homicidio en segundo grado no supera los diez años y una multa económica de 20.000 dólares (16.600 euros).
Tras leer el veredicto, el juez Peter Cahill ha anunciado que la sentencia se emitirá dentro de ocho semanas, después de analizar los últimos argumentos de la defensa de Chauvin, que permanecerá en prisión, y de la elaboración de un informe de investigación, que será posteriormente analizado en una audiencia previa.
La noticia ha sido recibida con júbilo por las decenas de manifestantes que han estado a las puertas del tribunal este martes y durante las más de dos semanas que ha durado el juicio.
"Este es un gran día para el mundo. Finalmente estamos empezando a ver. Caminamos con los ojos bien cerrados durante mucho tiempo, pero comienzan a abrirse hoy. Para mí significa que mis amigos y las personas que también han perdido a seres queridos ahora tienen la oportunidad de reabrir sus casos", ha celebrado la novia de Floyd, Courteney Ross, informa CNN.
"El capítulo de Dereck Chauvin puede estar cerrado, pero la lucha por la responsabilidad policial y el respeto por las vidas de los negros está lejos de terminar", ha valorado tras conocerse la sentencia la Asociación Nacional para el Progreso de la Gente Negra (NAACP, por sus siglas en inglés).
La NAACP ha remarcado la necesidad de que el "sistema de justicia" estadounidense reconozca "sus raíces supremacistas" y ponga fin a la "la inmunidad calificada", el principio legal que otorga a los funcionarios inmunidad frente a demandas civiles.
El movimiento 'Black Lives Matter' ha señalado, por otra parte, que pese a que "históricamente" el sistema judicial "ha fallado a las familias negras", con la decisión de este martes "se ha producido un pequeño paso hacia la rendición de cuentas". "Esperamos que este veredicto de culpabilidad comience a mostrar que la supremacía blanca no vencerá, que no tiene lugar en la democracia, especialmente en una que se supone que nos garantiza nuestra libertad para vivir", señala.
El fiscal general de Minesota, Keith Ellison, ha valorado que si bien "no se referiría como justicia al veredicto, porque la justicia implica una verdadera restauración", considera que al menos es una "rendición de cuentas, que es el primer paso hacia la justicia".
Por su parte, el gobernador de Minesota, Tim Walz, ha enfatizado en la idea que han expresado los grupos por los derechos civiles y ha señalado que sólo se pueden evitar nuevos episodios como el de Floyd "a través de un cambio sistémico real" de las instituciones.
"La trágica muerte de Daunte Wright esta semana sirve como un recordatorio desgarrador de que todavía tenemos mucho más trabajo por hacer. Demasiadas personas negras han perdido, y siguen perdiendo, sus vidas a manos de las fuerzas del orden público en nuestro estado", ha recordado.
"Debemos reconstruir, restaurar y reinventar la relación entre las fuerzas del orden y las comunidades a las que sirven. Debemos abordar las desigualdades raciales en todos los rincones de la sociedad, desde la salud hasta la propiedad de la vivienda y la educación", ha subrayado.
"La verdadera justicia requiere que aceptemos el hecho de que los afroamericanos son tratados de manera diferente, todos los días", han manifestado los Obama en un comunicado. "Requiere que reconozcamos que millones de nuestros amigos, familiares y conciudadanos viven con el temor de que su próximo encuentro con las fuerzas del orden público sea el último. Y requiere que hagamos el trabajo a veces ingrato, a menudo difícil, pero siempre necesario de haciendo que la América que conocemos se parezca más a la América en la que creemos ".
"Si bien el veredicto de hoy puede haber sido un paso necesario en el camino hacia el progreso, estaba lejos de ser suficiente", continúan los Obama. "No podemos descansar. Tendremos que seguir adelante con las reformas concretas que reducirán y, en última instancia, eliminarán los prejuicios raciales en nuestro sistema de justicia penal. Necesitaremos redoblar los esfuerzos para ampliar las oportunidades económicas para aquellas comunidades que han estado demasiado tiempo marginadas".
El presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris, en declaraciones pronunciadas el martes desde el Cross Hall de la Casa Blanca tras el veredicto, dijeron que la decisión del jurado era un punto de partida para una mayor justicia.
El presidente calificó el veredicto como "un paso gigante hacia la justicia en Estados Unidos", pero agregó que se necesita hacer mucho más. "Fue un asesinato a plena luz del día y arrancó las anteojeras para que todo el mundo lo viera", dijo Biden sobre el asesinato de Floyd. Harris dijo que si bien el veredicto trajo alivio, Estados Unidos aún enfrenta el racismo sistémico, y agregó que la injusticia racial está impidiendo que la nación se dé cuenta de todo su potencial. "Hoy sentimos un suspiro de alivio. Aún así, no puede quitar el dolor. Una medida de justicia, no es lo mismo que justicia equitativa", dijo Harris. "Este veredicto nos acerca un paso más, y el hecho es que todavía tenemos trabajo por hacer. Aún debemos reformar el sistema". La vicepresidenta también pidió al Senado que apruebe la Ley de Justicia en la Policía de George Floyd, calificándola como parte del legado de Floyd.