Un militar de Rusia se encuentra en busca y captura tras violar a una mujer en la región de Kiev. Los fiscales ucranianos lo han identificado y lo buscan porque mató a un hombre desarmado y violó repetidamente a su esposa delante de su hijo. Otra mujer ucraniana, Anastasia Tarán, ha contado cómo en Irpin los soldados de Vladimir Putin “violan a las mujeres” y disparan a los civiles que se “esconden en los sótanos”.
La fiscal general de Ucrania, Iryna Venediktova, ha dicho que el soldado ruso en busca y captura irrumpió en una vivienda y disparó al dueño: "El ocupante borracho y su compañero violaron repetidamente a la esposa del civil asesinado, amenazándola con violencia y armas. Incluso amenazaron a su hijo pequeño, que estaba con la víctima".
"El militar ruso está imputado por violar las leyes y costumbres de la guerra. Se encuentra en busca y captura y se ha presentado una orden de detención ante el tribunal", ha informado Iryna Venediktova.
Anastasia Tarán es una joven de Ucrania que huyó de la ciudad de Irpin, cerca de Kiev, a los pocos días de la invasión de Rusia. Ha contado que Irpin es un “infierno”, donde “los soldados violan a las mujeres” y “disparan” a quienes se esconden en los sótanos.
“Irpin es un infierno. Hay muchos soldados rusos que se limitan a disparar a la gente cuando entran en las casas particulares y, en el mejor de los casos, sólo los echan. Violan a las mujeres y se limitan a tirar a los muertos. Abren los sótanos donde se esconde la gente y les disparan”, ha declarado Anastasia Taran, de 30 años, que logró huir con su marido y sus gatos.
La joven logró salir de Irpin y ahora está en Lviv, la ciudad más grande cercana a Polonia. “Me siento más tranquila, pero todavía estoy ansiosa. Me da miedo el silencio, me da miedo salir a la calle, siempre voy buscando refugio”.