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Las manifestaciones contra la guerra de Ucrania, en la que ya no se respeta ni a los civiles, se suceden por todo el planeta. La de Berlín, por ejemplo, ha sido masiva. Pero especialmente reseñables son las que siguen celebrándose en Rusia, a pesar de que los manifestantes se arriesgan a ser detenidos. Ya son casi 15.000 las personas detenidas en los últimos días. En las últimas horas Moscú está deteniendo a quienes muestran un folio en blanco, una forma de protesta tan elocuente como muda.
Con extrema violencia, los policías de Vladimir Putin arrestan a los que participan en manifestaciones en contra de la guerra en Ucrania. Especialmente a aquellos, que siguiendo la inercia de las redes sociales, muestran un folio en blanco, un símbolo ya no solo contra la invasión sino contra todo lo que el Kremlin representa.
Solo este domingo, la policía de Rusia ha detenido al menos a 850 personas en las 23 ciudades donde los ciudadanos se ha echado a las calles.
Mientras, en Jersón, en Ucrania y al paso de blindados y camiones rusos con la 'Z' que los identifica, los ciudadanos ucranianos increpan y piden a las tropas rusas que se vayan a casa.
La respuesta de los militares rusos ha sido disparar.
Desafiando las bajas temperaturas han marchado en Toronto, en Canadá, pidiendo el cierre del cielo ucraniano, exigencia del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski. Con los colores de la bandera ucraniana se ha escuchado un grito común: "Paremos a Putin".
Multitudinaria ha sido también la protesta en Berlín. Según la policía germana unas 30.000 personas ha exigido al presidente de Rusia que ponga fin a la invasión y han mostrado su solidaridad con el pueblo ucraniano. "Es importantísimo que los ucranianos vean que no los olvidamos, ni en dos semanas, ni después".
Las mismas consignas se han escuchado en Tel Aviv. Ucrania vería con buenos ojos la mediación de Israel en las negociaciones con Rusia.