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El estado de salud de Joe Biden y el fracaso del debate electoral ante Donald Trump hizo saltar las alarmas entre el electorado demócrata de cara a las elecciones estadounidenses de noviembre. Ahora los ojos están sobre Kamala Harris, la vicepresidenta de Estados Unidos, ante una posible renuncia del mandatario norteamericano, tal y como informa en el vídeo Rubén G. Enebral.
Y es que los grandes medios aumentan cada vez más la presión para que el líder demócrata acabe abandonando por su edad y estado de salud. La opción de Kamala Harris empieza a cobrar fuerza, a pesar de su baja popularidad durante el mandato.
La vicepresidenta, de 59 años, no solo tiene a su favor ser la sucesora natural de Biden, sino que las encuestas de intención de voto la sitúan por delante de otras caras populares del partido y heredaría toda la estructura de la campaña.
Harris intentó salir este miércoles al paso de los rumores al participar junto a Biden en una llamada con el personal de la campaña de reelección, lanzando así un mensaje de que apoya incondicionalmente al mandatario.
Pero según un sondeo de la CNN publicado el martes, Harris tendría un mejor desempeño electoral contra Trump que Biden, si bien el republicano se impondría en ambos casos.
En un duelo entre Biden y Trump, el republicano ganaría con un 49 % de los votos frente al 43 % del demócrata. En caso de que la candidata fuera Harris, un 47 % asegura que votaría por Trump y un 45 % por ella.
La campaña demócrata ha cerrado filas en torno a Biden, cuya familia lo está animando a seguir en la carrera, pero cada vez más gente dentro del partido está pidiendo en privado su retirada.
Tanto el diario 'The New York Times' como la cadena CNN publicaron este miércoles que Biden habría reconocido ante un aliado cercano que su candidatura peligra si no logra calmar las aguas en los próximos días, un extremo desmentido por la Casa Blanca.
En una conversación informal, Trump daba por hecho que acabaría enfrentándose a Harris. "Tenemos a Kamala y es mejor para mí. Es tan mala, es tan patética", se escucha al magnate en el vídeo.
Algunos politólogos la siguen considerando, por su impopularidad, la peor opción entre las alternativas a Biden que se han barajado. Sin embargo, otros creen que podría atraer a muchos votantes indecisos.
Esta abogada de 59 años ya se convirtió en la primera vicepresidenta de Estados Unidos. Ahora podría vengar la derrota de Hillary Clinton ante Trump y ser la primera mujer en llegar a la Casa Blanca.
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