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Un grupo de unos 60 migrantes que partieron de Líbano hace seis días fue rescatado este miércoles por las autoridades de Chipre, después de que su pequeño bote de madera quedara a la deriva en el Mediterráneo cerca de la costa sureste de la isla.
El Centro de Rescate Marítimo de Chipre informó en un comunicado que un barco comercial que pasaba por la zona avistó el bote y alertó a Nicosia, que envió a la Policía Portuaria y Marítima.
Los policías portuarios sacaron del bote a todos los migrantes y los trasladaron a tierra. Allí, las autoridades constataron que tres menores y un adulto habían perdido el conocimiento, y que otras tres personas tenían fracturas en las piernas.
La tripulación del bote de la Guardia Costera les dio reanimación cardiopulmonar y primeros auxilios de inmediato, según indicó el Centro de Rescate Marítimo de Chipre, que también dijo que los heridos fueron llevados al hospital de urgencia.
La distancia entre la costa de Líbano y Chipre es de unos 168 kilómetros.
A pesar de que el número total de migrantes que llegan a Chipre ha bajado significativamente, las llegadas por mar se multiplicaron por casi cuatro, pasando de 937 en 2022 a 3.889 en 2023. Casi todos los migrantes proceden de Siria, según datos oficiales del Ministerio del Interior.
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