Israel sigue avanzando en su ofensiva terrestre que comenzó hace tres días y que será, según las autoridades del país, larga. Sus tanques ya se sitúan a las afueras de la ciudad de Gaza, confirmando su continuo avance hacia el interior de la Franja. Un equipo de televisión ha grabado cómo un carro de combate israelí disparaba contra un vehículo cuando este daba media vuelta intentando huir. Tel Aviv asegura que en las últimas horas sus hombres han matado a decenas de miembros de Hamás.
En el coche, viajaban un padre y sus hijos. Pretendían huir por la carretera principal que une el norte y el sur de Gaza. Testigos de esta matanza, unos periodistas, alertaron de los ocurrido y pidieron a todos que se diesen la vuelta.
En esta nueva fase de la guerra, el ritmo con el que se transmiten las órdenes para el avance de las tropas hacia la ciudad de Gaza es frenético. Los bombardeos israelíes destruyen 600 objetivos en la Franja, mientras los carros de combate avanzan en masa y afianzan el control del territorio que hay desde la frontera este hasta la carretera principal que cruza la franja de norte a sur.
La han cortado y disparan contra cualquier vehículo que se acerque, como el que conducía el padre de familia muerto junto a dos de sus hijos tras recibir un impacto directo.
Hamás advierte de que están preparados para repeler la ofensiva de la infantería. Mientras tanto, siguen cayendo bombas cerca del hospital Al Quds, donde hay 14.000 personas refugiadas.
Desde Ramallah, en Cisjordania, el primer ministro palestino muestra la larga lista de muertos. Más de 8.300 según Hamas. Víctimas como los cuatro fallecidos durante esta incursión israelí en Jenin, la entrada al campo de refugiados, símbolo del anhelado regreso de los desplazados por la ocupación.