El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que en el marco de la guerra entre Hamás e Israel ayer se reunió directamente con el primer ministro y el presidente israelí, Benjamin Netanyahu e Isaac Herzog, respectivamente, ha asegurado que la ayuda humanitaria comenzará a llegar mañana a Gaza.
Durante una parada técnica, el presidente de Estados Unidos mantenía una charla con los periodistas en la que señalaba que en esta primera fase serán veinte camiones los que entren en la Franja.
A ese respecto, el inquilino de la Casa Blanca presumió de haber llevado directamente la negociación y agradeció la predisposición del mandatario egipcio Al Sisi a abrir el paso fronterizo de Rafah mientras los bombardeos y los ataques continúan.
La ayuda, no obstante, entrará con cuentagotas y con ciertas restricciones. Solo entrará agua, comida y medicamentos. Israel quiere asegurarse de que nada de esa ayuda acabe en manos de Hamás. De lo contrario, ha dicho, se volverá a cerrar el paso.
Ante esta situación, se están acomodando los accesos a la zona, muy dañados por los bombardeos, siendo el último a tan solo ocho kilómetros de la frontera.
Tras conocerse la apertura para el paso de la ayuda humanitaria, la Presidencia de Egipto confirmaba su decisión de facilitar su llegada: "Hemos acordado llevar ayuda humanitaria a través de la Franja a través del paso fronterizo de Rafah de manera duradera, con las autoridades competentes de los dos países coordinándose con las organizaciones humanitarias internacionales bajo la supervisión de Naciones Unidas para garantizar el acceso", expresaban en un comunicado.
Así mismo, el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, comunicaba esta decisión a su homólogo estadounidense, Joe Biden, en una llamada telefónica en la que se centraron "en la situación humanitaria" del enclave.