Tres hermanos han sido acusados de ocultar el cadáver de su propio padre para seguir recibiendo su pensión de jubilación, después de que la policía italiana encontrara su cuerpo en estado de descomposición en una cueva cercana a la localidad de Anversa degli Abruzzi, ubicada en la provincia de L'Aquila, Italia.
La víctima ha sido identificada como Bruno Del Negro, un hombre de 81 años de la ciudad italiana de Trani, quien habría fallecido por causas naturales. Uno de sus hijos descubrió su cadáver en su lecho de muerte y, en complicidad con sus hermanos, decidió deshacerse de él.
El cuerpo fue identificado por los Carabinieri de la Unidad de Investigación de L'Aquila gracias a una placa que se halló en su fémur, que había sido aplicada poco antes de su fallecimiento, según publica el diario Clarín.
Tanto los descendientes del difunto como la pareja de uno de ellos metieron el cuerpo en un saco de dormir y lo ocultaron en una cueva a 350 km de su hogar. A partir de entonces, continuaron recibiendo el dinero de su progenitor, el cual ascendía a unos 3.000€ mensuales. Se estima que cobraron, aproximadamente, 60.000€ hasta ese momento.
Los hijos del fallecido enfrentan cargos, junto con su cómplice, por supresión del cadáver, estafa a la Seguridad Social italiana (conocida como INPS) y uso indebido de tarjeta de cajero automático.
Resulta un suceso impactante que ha conmocionado a toda Italia, que recuerda al del cadáver de la anciana de 78 años que fue hallado dentro de un congelador a principios de año.