Un hombre de 47 años, identificado como J. R. Mora, ha sido encontrado sin vida el martes 14 de marzo en una alcantarilla del sector Los Rastrojos en Pregonero, Venezuela. Funcionarios de Protección Civil del municipio Uribante recibieron una llamada por parte de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y tras la identificación del cadáver, se supo que el hombre llevaba desaparecido desde el domingo 12 de marzo.
Las circunstancias en las que falleció el hombre son aún materia de investigación para las autoridades responsables del caso.
Tras una evaluación de los restos de Mora, los servicios de emergencia determinaron que el hombre no presentaba ninguna fractura de cráneo, ni de columna ni de alguno de sus miembros inferiores. Además establecieron que los signos de lividez cadavérica se ubicaban en la región del tórax, al parecer debido a la posición boca abajo como se encontraba según informa el diario La Nación.
A pocos metros del alcantarillado, las autoridades encontraron una botella de licor, por lo que todo apunta a que el hombre estaría presuntamente bajo los efectos del alcohol al momento de caer en la alcantarilla.
El cuerpo de Mora quedó a disposición de las autoridades. En este orden de ideas, además de Protección Civil Uribante, en el lugar se hicieron presentes funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, Policía del estado Táchira, la Policía Nacional Bolivariana y personal médico del Hospital de San Roque de la citada jurisdicción de montaña.
En septiembre de 2022, una joven de 18 años perdió la vida tras caer en una alcantarilla sin tapa que se encontraba en las inmediaciones de la Universidad del Norte en Puerto Colombia. La joven caminaba sola sobre una carretera muy oscura y no se percató de que había una alcantarilla sin tapa en el camino, además de que la misma estaba tapada por el césped. De pronto la joven cayó al alcantarillado de al menos siete metros de profundidad.
Testigos llamaron a los bomberos de Puerto Colombia y la afectada logró salir consciente y con dolores intensos. Fue intervenida en la clínica Porto Azul y, tras permanecer seis días en el lugar, falleció "por una bacteria", según denuncian sus familiares. “Increíble que en la clínica Porto Azul acaban con la vida de una niña de 18 años, llena de sueños y con un futuro por delante, todo por la negligencia médica y por la ineptitud humana. Exigimos justicia por ti, mi ‘Pache’ ”, expresó una allegada.