Un hospital español de campaña en Turquía para evitar la quiebra psicológica ante el horror

Una semana después de que se produjese el primer terremoto en Turquía y Siria, España sigue estando muy presente en el país turco. A pesar de que algunos equipos de rescate han regresado ya a casa tras una larga semana de intensos y emotivos rescates, España no ha abandonado por completo la zona. Desde hoy, un hospital de campaña español en Alejandreta (Turquía) les blindará a las víctimas los servicios primarios de salud. Desde ayudas básicas hasta operaciones quirúrgicas, sin olvidar la atención psicológica tras el horror de los terremotos.

El Equipo Técnico Español de Ayuda y Respuesta a Emergencias (START), conocidos popularmente como los 'chalecos rojos', llegó el pasado viernes a la ciudad turca de Alejandreta. Allí, se trasladaron 82 sanitarios del personal médico público español, con el fin de ayudar a los más necesitados. Desde entonces, se pusieron manos a la obra para empezar este lunes a pasar consulta a los cientos de personas que necesitan atención médica tras los terremotos. Cada día, atenderán a alrededor de unas 200 personas.

El hospital de campaña ayuda a la ciudadanía turca médica y psicológicamente

En una sala de espera al sol, los ciudadanos turcos esperaban su turno para ser atendidos en el hospital de campaña español. Allí han acudido esta mañana personas víctimas de los terremotos con "problemas crónicos, embarazadas, problemas respiratorios, infecciones", entre otros, asegura Roberto Ranz, Jefe del Departamento de Emergencias AECID, quien colabora en el hospital de campaña. En las distintas tiendas de campaña, los sanitarios españoles pueden atender a doscientas personas diariamente y realizar hasta siete intervenciones quirúrgicas.

Para comunicarse con la ciudadanía turca, los sanitarios rompen la barrera del idioma con traductores, aunque aseguran que en caso de necesidad utilizan 'Google Translate', que "va fenomenal", como nos cuenta Elena Gil, pediatra en el hospital de campaña de Alejandreta. Esta no es la primera vez que Elena colabora en desastres naturales similares, como tampoco es el caso del psiquiatra Ricardo Angora, quien atiende a los supervivientes de los terremotos que se encuentran angustiados y en riesgo de quiebra psicológica. "De pronto se quedan sin nada. Es muy duro superar eso. Ahora mismo no tienen trabajo, un sitio en el que estar. Muchos han perdido a sus familiares. Están en una situación psicológica muy difícil", relata Angora sobre las víctimas de los terremotos.

Esta víctimas han sobrevivido a los terremotos, pero la incertidumbre no les permite reaccionar. Por ello es muy importante la labor de Ricardo, que les ayuda "mentalmente para que se sobrepongan a la adversidad con la que se encuentran en estos momentos".