El cuerpo momificado de Marinella Beretta fue encontrado por las autoridades de Como, Italia, en el interior de su casa donde permanecía sentado en una silla dentro de la cocina del hogar. Los vecinos aseguran no haberla visto en los dos últimos años y tampoco ser conscientes de su fallecimiento.
El hallazgo se dio cuando los vecinos de Marinella, que vivían cerca del Lago Como, al norte de Italia, llamaron a los servicios de emergencia ya que la zona se estaba viendo afectada por las fuertes lluvias que provocaban la peligrosa caída de árboles ubicados en los jardines del barrio. Los bomberos trataron de contactar con Beretta para que la mujer autorizara la entrada a su domicilio y así atender la emergencia, pero al no recibir respuesta, los servicios solicitaron autorización fiscal con la cual lograron acceder a la casa, según informa el diario italiano Corriere della Sera. ”Con la autorización del fiscal de Como, tras los primeros controles fallidos, los policías entraron en la casa y descubrieron la tragedia", explica.
El periódico indica que los servicios de emergencia no detectaron daños en el domicilio, pero al entrar en la cocina encontraron el cuerpo de Marinella momificado y sentado en una de las sillas de la sala. Según investigaciones, parece que la mujer pudo fallecer por causas naturales en esas condiciones, ya que no habría podido levantarse a pedir ayuda a sus vecinos y Baretta no contaba con familiares ni amigos a los que acudir.
Las autoridades llevaron el cuerpo de la mujer de 70 años al hospital para adelantar los respectivos procesos judiciales.
El motivo por el que los vecinos no supieron nada de ella antes del hallazgo fue porque estaban convencidos de que Marinella se había mudado hace dos años, justo antes de la pandemia de covid19, por lo que ninguno se acercó a comprobar su estado de salud. "Con la pandemia, entre otras cosas, todos los contactos se han vuelto difíciles. Parece que nadie había oído hablar de ella desde al menos el mes de septiembre de 2019: por lo tanto, la muerte podría remontarse a ese periodo”, indicó el diario italiano.
Tras el hallazgo, muchos habitantes de Italia se preocuparon por la alarmante situación de soledad que viven las personas mayores en el país. El alcalde de Como, Mario Landriscina, quiso que se tomara esta terrible situación como una enseñanza común: ”Debe ser un momento de reflexión sobre un ejemplo de soledad que realmente nos debe llevar a mejorar y cambiar ciertas dinámicas”. Según el Instituto Nacional de Estadística, en Italia casi el 40% de los adultos mayores viven solos y no tienen familiares o amigos cercanos a los que acudir en caso de necesidad.
”Es una historia dolorosa que merece una gran consideración y reflexión. Me dejó mucha amargura. Miramos los papeles para ver si la mujer era conocida en el Ayuntamiento y si habíamos cometido una negligencia imperdonable. Este no es el caso, aunque esto no me exime de lo que pasó”, confirma el alcalde Landriscina. La ciudadanía fue invitada por el funcionario al funeral de Marinella, pagado por la Alcaldía, para compensar la soledad que sufrió antes de irse. ”Ahora tenemos que estar cerca de ella al menos cuando se vaya de esta tierra en la que evidentemente ha vivido en soledad. Es una tragedia que ocurrió en un contexto complicado por la pandemia, desde una ciudad cerrada y aislada. Quién sabe cuánto sufrió esta mujer”, concluye.