Saltos de vértigo en Vigo: la moda del ‘cliffjumping’, que ha venido para quedarse

  • Un grupo de diez jóvenes practican la disciplina, que aúna ‘parkour’ y clavadas al agua

  • Entrenan diariamente en el espolón de ETEA, aunque exploran lugares nuevos en los alrededores

  • Las redes sociales les sirven de inspiración y además se entrenan en el gimnasio para ganar fuerza y potencia

En Vigo, como en Barcelona o en las Baleares aunque a menor escala, hay un grupo de diez jóvenes que practican el cliffjumping, un deporte moderno de saltos al agua que ha ido ganado adeptos y que divierte al que lo practica y deleita al que lo observa, aunque eso sí, como en todos los deportes de riesgo, este último no pone en peligro su integridad física y, consecuentemente, tampoco recibe la descarga de adrenalina del deportista. Informan N. Soriano, D. Rodríguez y S. Almeida.

Se trata de una modalidad de riesgo urbana, que combina el deporte de salto de trampolín con la disciplina del ‘parkour’, y que en Vigo reúne diariamente en el espolón de ETEA a una decena de jóvenes que lo practican.

Con una mezcla perfecta de “prudencia y valor” estos deportistas realizan saltos imposibles que van perfeccionando gracias a las horas de dedicación y también a las redes sociales, que confiesa, les sirven de “inspiración”.

 

Saltos de vértigo pero con prudencia y seguridad

Javier González, por ejemplo, empezó en este deporte a través del ‘parkour’ que practicaba desde los 9 años. Su gusto por hacer mortales lo llevó a cambiar los saltos en firme por saltos al agua, y posteriormente a explorar lugares que le permitieran realizar “más variedad” en sus acrobacias.

Igual que Rodrigo Álvarez, practica el cliffjumping durante todo el año, aunque en verano le dedica más tiempo “por las buenas condiciones climatológicas”, explica.

Pero sus entrenamientos no se reducen a realizar saltos en el agua; como todo buen deportista de élite y preocupado por mejorar, estos jóvenes se entrenan en el gimnasio, ganado fuerza y potencia para mejorar sus ‘clavadas’.

Aunque puede parecer que debido a su juventud no miden el peligro al que se exponen, nada más lejos de la realidad, ya que todos confiesan que lo primero que hacen es comprobar la profundidad del agua antes de saltar y que realizan estiramientos previos al salto, para “acondicionar el cuerpo ante un posible golpe”, detallan. Además, suelen practicar este deporte siempre en compañía de más personas “por si pasa algo”, y recomiendan lo mismo a quien se inicie en la disciplina, que gana adeptos a pasos agigantados.

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.