Galicia prepara un decreto para que las farmacias lleven los medicamentos a casa

El Gobierno gallego confía en tener en vigor a "principios de 2025" el nuevo decreto que regulará el reparto de medicamentos a domicilio por parte de las farmacias a pacientes que tengan dificultades de accesibilidad, es decir, que sean dependientes o que vivan en zonas del rural.

La idea, según ha explicado en rueda de prensa el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, es que sean las cinco farmacias más próximas a las respectivas viviendas las que realicen esta dispensación, con receta, puerta a puerta. En casos excepcionales, por decisión de los pacientes, podrá hacerse a través de otra botica de la misma área.

También se habilitará un sistema para que los servicios de farmacia hospitalaria puedan realizar "entregas informadas" en casos de medicamentos más complejos. Para ello, podrán colaborar las oficinas de la zona.

Decreto en marcha para estrenar la medida en 2025

Esta dispensación a domicilio, contemplada en la ley gallega de ordenación farmacéutica de 2019, ya se realizó durante la pandemia de la covid-19 de manera excepcional. Este decreto permitirá mantenerla y generalizarla al conjunto de Galicia.

Preguntado sobre los costes que pueden suponer para las boticas realizar este reparto, Rueda no ha descartado que la Xunta tenga que habilitar financiación a los negocios.

En cualquier caso, el decreto empieza ahora su elaboración --con ese objetivo de que a "principios de 2025" esté ya en vigor-- en el que habrá un proceso "de escucha intenso" con el sector.

Compra de suturas mecánicas

Siguiendo en clave sanitaria, el Consello de la Xunta ha autorizado este lunes la compra centralizada por parte del Sergas, para todas sus áreas sanitarias, del suministro de suturas mecánicas durante tres años por más de 20,2 millones de euros.

Alfonso Rueda ha destacado que será la "primera compra centralizada" de estos materiales, lo que supondrá un ahorro anual de casi 400.000 euros.

A mayores, el Gobierno gallego ha aprobado la contratación durante cinco años, por casi 18 millones de euros, del servicio de mantenimiento de equipos de alta tecnología de la marca Varian para radioterapia y branquiterapia.

En total, son 17 aceleradores --seis habían sido comprados con fondos europeos-- de los que anualmente se benefician 9.000 pacientes de cáncer. Estos equipos les permiten acceder a tratamientos con técnicas menos invasivas, menos dolorosas y más seguras.

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