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Este año entró en vigor en Galicia la obligatoriedad de registrar los gallineros de autoconsumo de todas las explotaciones avícolas de menos de 30 ejemplares, que establece el Real Decreto 637/2021, y que ha llevado a que en la Comunidad ya se supere en número a los registrados en toda España, con más de 52.000 gallineros inscritos oficialmente.
El motivo de esta medida, que no acaba de convencer a pequeños propietarios ni al Gobierno autonómico, que insiste en rechazar este registro obligatorio y ve esta medida como “otro ejemplo de burocracia innecesaria impuesta al rural”, es tener localizadas a las explotaciones y poder protegerlas en caso de que aparezca algún foco de gripe aviar.
Aunque los propietarios de este tipo de granjas no pueden comercializar la carne, los huevos ni cualquier otro tipo de producto, están obligados a registrar sus animales; y a mayores, identificar a un veterinario de referencia al que recurrir si apareciese algún tipo de problema sanitario.
Pese a su disconformidad con las medidas de este decreto, la Xunta sostiene que es “muy sencillo registrar los gallineros”.
No hacerlo supone, además, que los propietarios no puedan adquirir más aves y que se expongan a multas que van desde los 600 a los 3.000 euros.
Estas sanciones, que no están recogidas en el decreto sino especificadas en la Ley de Sanidad Animal, se aplicarán si se observa “fraude o mala fe” por parte de la persona sancionada, valorando si la infracción es leve, grave o muy grave.
Cualquier propietario que posea un corral familiar donde haya gallinas, pavos, patos, gansos, codornices o cualquier otro animal que produzca huevos o carne para autoconsumo, tiene que ser registrado.
Los pequeños propietarios interesados en registrar su gallinero, de no más de 30 animales, deben presentar una comunicación simple en los registros de la Xunta, siguiendo el modelo que proporcionan en las oficinas correspondientes.
La inscripción, totalmente gratuita y abierta todo el año, se puede hacer de forma presencial cubriendo el formulario disponible en la Oficina Agraria Comarcal y entregándolo allí mismo; o bien a través de la Sede electrónica de la Xunta, realizando el trámite por internet.
En caso de preferir la primera opción, el formulario se puede descargar en la web de la Consellería de Medio Rural, cubrirlo y depositarlo en cualquier registro de la Xunta.
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