Un matrimonio de Arteixo, denunciado por el canto de uno de sus gallos

  • El matrimonio ha sido denunciado por "contaminación acústica"

  • El denunciante asegura estar en desamparo por parte de las autoridades

  • El matrimonio presentará a su gallo a la Feira do galo de la localidad

Cerdos, gallos, gallinas, patos, conejos... en la granja de León y Elena, en Arteixo, siempre ha habido una gran variedad de animales domésticos, pero es ahora, después de 43 años viviendo allí, cuando este matrimonio se encuentra por primera vez con problemas con los vecinos por este hecho.

El canto de un gallo en concreto es el origen de un conflicto que no tiene trazas de solucionarse a corto plazo.

Hace unos días que León y Elena recibieron una nota en la que rezaba lo siguiente: "Se escucha más fuerte dentro del edificio que en la calle. Por favor, ya basta con el gallo". Estaba escrita a mano por un vecino de la zona que se presentó en su vivienda posteriormente, según afirman, exigiendo el fin de los cánticos del ave.

Elena asegura que su gallo tiene un horario regular de canto, "a las 5:45 horas que es cuando se despierta y a las 21:00 horas antes de irse a dormir", a lo que añade con la ironía que la caracteriza que "si se acostara y se levantara a la misma hora que el gallo no tendría problema ninguno", aludiendo directamente al autor de la nota.

Denunciados por contaminación acústica

Por su parte, el vecino afectado, que ha hablado para Nius, explica que se siente "desamparado por el ayuntamiento y por la policía", donde ha denunciado el caso al tratarse de lo que considera "una infracción por contaminación acústica".

Para situarnos y entender el conflicto, estamos en una esquina del barrio de A Baiuca, el más antiguo del Concello de Arteixo, a muy pocos metros del ayuntamiento. Aquí se mezclan casas de aldea de más de medio siglo de antigüedad, como la de Elena y León, con modernos edificios de varias alturas, donde reside el denunciante.

El matrimonio tiene un gallinero en la parte trasera de su vivienda donde, hasta hace poco, convivían cuatro gallos que habían nacido allí y que uno a uno habían ido sacrificando para su consumo. Ahora solo queda el de los cánticos, que paradójicamente, no ha corrido la misma suerte que sus hermanos gracias a que la nota enfadó a sus dueños e hizo que decidieran concederle el indulto y perdonarle la vida. 

"Lo voy a presentar a la Feira do Galo"

Otro argumento que el matrimonio expone a la hora de defenderse de las acusaciones de su vecino es que Arteixo celebra cada Navidad su tradicional Feira do Galo. Aseguran que no es normal sufrir acoso por los cánticos de su gallo cuando hay una fiesta temática en su honor en su localidad, a la que, por cierto, Elena tiene pensado presentar a su ejemplar "si no muere antes", aclara.

"El gallo lo voy a dejar y lo voy a presentar en la feria tradicional de Navidad, a ver si con tanto bombo se lleva el primer premio", bromea Elena, a lo que añade que, "y si no puede dormir que insonorice el edificio", refiriéndose al vecino que se queja de su canto.

La polémica está servida y, de momento, sólo nos queda esperar si el gallo de Elena y León se hace con el primer premio en la Feira do Galo de Arteixo.