La fiscal superior del País Vasco, Carmen Adán, ha dado a conocer en el Parlamento Vasco las conclusiones de la memoria de actividad de la Fiscalía. Un informe que revela que los menores cada vez delinquen con más frecuencia y mayor gravedad, y que en los centros tutelados se registran numerosos casos de violencia sexual, por lo que recomienda que "no sean mixtos".
En 2023, crecieron exponencialmente los casos de violencia sexual cometidos por menores de edad, en concreto, según detalló, se tiene constancia de 56 agresiones sexuales y 24 abusos. Además, Adán hizo hincapié en que los centros de menores tutelados son escenario de algunas de las agresiones registradas.
En concreto, de las más de 40 denuncias tramitadas, una docena tienen como víctimas y agresores a jóvenes de los propios recursos y, en ocasiones, al mismo centro como escenario de la agresión.
La máxima responsable del Ministerio Público en el País Vasco propone un cambio de modelo para tratar de revertir estas cifras en los centros tutelados. Así, recomienda a las diputaciones vascas la posibilidad de separar a los jóvenes que tutelan por sexos para evitar que se produzcan nuevas agresiones.
Las razones que recoge el texto oficial, y publica El Correo, para recomendar la modificación de los modelos actuales son varias: “Que la sociedad está muy sexualizada”, que los jóvenes tutelados “tienen problemas de afectividad”, y “la explosión hormonal que se produce a determinadas edades”. Una decisión que, en última instancia, deben acometer los propios centros y que no sería barata.
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