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“Sigo creyendo que algún día se recuperará y esta pesadilla se va a acabar”. La pesadilla a la que se refiere Ana Claudia es ver como su hijo veinteañero permanece en estado vegetativo tras una paliza brutal que recibió el 25 de julio de 2021 en la localidad vizcaína de Amorebieta. En un principio los pronósticos médicos no daban la más mínima esperanza a esta madre, su hijo se moría.
Sin embargo, Álex sigue vivo casi tres años después de aquella terrible madrugada, “aunque condenado a prisión permanente”, como denunció la abogada de la familia, en alusión a su estado completamente dependiente. Su madre no se separa de su cama y mantiene la esperanza, como deja claro la frase con la que comienza este artículo.
Tanto es así que pese a la opinión de las forenses, que testificaron durante el juicio a siete de los acusados de la agresión a Alexandru, y que declararon que pese a la entrega total de Ana Claudia, la esperanza de vida de Álex “es corta” y con “mínimas” opciones de mejorar. Esta madre no se rinde.
La esperanza ahora se llama craneotomía. Una intervención quirúrgica, la quinta desde la paliza, que en un principio, tal y como señala El Correo, los médicos habían desestimado, pero que finalmente le van a realizar para colocarle una prótesis en la cabeza porque se le está deformando. El hueso que en su día hubo que quitarle porque estaba roto y ponía en riesgo su vida, debe ser ahora reconstruido. Esta operación, conlleva los evidentes riesgos, pero podría mejorar la calidad de vida de Álex.
La luz verde a esta nueva operación ha llenado de esperanza a Eugenio y Ana Claudia, los progenitores de la víctima de esta brutal agresión. La segunda alegría en los últimos días tras conocer la contundente sentencia de la Audiencia provincial de Bizkaia que condena a cuatro de los siete acusados de la paliza que dejó en estado vegetativo a Alexandru Ionita en Amorebieta en 2021, a 20 años de prisión como autores de un delito de asesinato en grado de tentativa con pertenencia a grupo criminal. Los mismos delitos por los que condena a un quinto procesado a 14 años de cárcel, al apreciar en su caso la atenuante de anomalía psíquica.
El fallo impone 10 años de prisión a un sexto imputado como cómplice de un delito de asesinato en grado de tentativa con pertenencia a grupo criminal. Al séptimo de los procesados le condena como autor de un delito de omisión del deber de socorro a una multa de 12 meses a razón de 10 euros diarios.
El castigo es inferior a la pena que solicitaba la familia, que inicialmente reclamaba prisión permanente revisable para los imputados y que, más tarde, redujo la solicitud a 30 años. Pero también es superior a los 14 años y 8 meses que solicitaba la Fiscalía para los encausados por un delito de asesinato en grado de tentativa.
El 25 de julio de 2021, Álex fue agredido por 16 personas, entre 15 y 38 años, en Amorebieta (Vizcaya). La paliza que le dieron fue tan salvaje que Alex, tras debatirse entre la vida y la muerte, ha quedado en estado vegetativo. Los menores implicados fueron juzgados hace un año y sentenciados a penas de entre tres y cinco años de internamiento cerrado como coautores de un delito de asesinato con alevosía en grado de tentativa.
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