El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha insistido hoy de nuevo en que el Partido Popular y la Comunidad de Madrid deben aclarar cuanto antes las acusaciones de corrupción que se han lanzado desde los 'populares' contra la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por la comisión cobrada por su hermano de una empresa que consiguió un contrato de 1,5 millones para suministrar mascarillas durante el confinamiento.
Durante la rueda de prensa que ha ofrecido junto con la primera ministra del Reino de Dinamarca, Mette Frederiksen, Sánchez ha recalcado en que él no se va a inmiscuir en la situación interna de ningún partido político porque está en gestionar la recuperación económica, los fondos europeos y la creación de empleo para que, ha precisado, "cuando termine esta Legislatura en 2023 podamos tener un país mejor".
Dicho esto, ha advertido de que España necesita estabilidad y ésta no solo la aporta el Gobierno sino también el principal partido de la oposición. Por este motivo, ha mostrado su esperanza de que los 'populares' resuelvan cuanto antes esta crisis "por su bien y por el de todos".
Pero sobre todo, ha advertido de que lo que deben resolver es la "principal incógnita" de este debate y son las "acusaciones cruzadas de irregularidades y corrupción que puedan haberse producido en el seno de la Comunidad de Madrid. En cuanto al hecho de que la crisis interna del PP esté disparando a Vox en las encuestas, el jefe del Ejecutivo ha considerado que esto "no es una buena noticia para ningún demócrata".
No obstante, y de cara a los pactos que pueda haber en Castilla y León para formar gobierno, ha vuelto a reiterar su oferta para "definir un cordón sanitario a la ultraderecha" si el PP está dispuesto. Si es así, ha insistido en que el PSOE está abierto a ofrecer esa alternativa. La semana pasada, Pedro Sánchez ofreció facilitar el gobierno de Mañueco en Castilla y León con la condición de que el PP rompa con Vox en todas las comunidades autónomas.