Nueva de tregua en La Palma. La inactividad del volcán de Cumbre Vieja a los palmeros que empiezan a confiar en que el final de la pesadilla está cerca. Ya son más de 48 horas sin tremor volcánico pero los expertos piden prudencia. Son necesarios al menos 10 días de actividad nula para dar por concluida la erupción del volcán.
Más nítida que nunca se aprecia la morfología del volcán. Una sucesión de cráteres sin actividad visible que permite a los científicos aproximarse a pie al edificio volcánico.
Los técnicos miden los gases que aún emanan del volcán de Cumbre Vieja, aunque en dosis mucho menores que en días anteriores. El volcán alcanza una altura de 1124 metros.
La lava, que bajaba en grandes cantidades es ahora solo un recuerdo en los canales que aparecen vacíos. Las coladas tampoco muestran ya lava en superficie pero las cámaras térmicas siguen reflejando la gran temperatura que late en el interior. “Tenemos temperaturas de más de 400 grados...”, señalan los vulcanólogos sobre el terreno.
Aún pasará mucho tiempo para poder regresar a este territorio arrasado, pero al mirar al volcán. Los palmeros respiran mucho más tranquilos. “Gracias a dios...gracias a dios...”, dice una vecina. Es “una alegría verlo así”, dice un hombre. Hasta quitar la ceniza del coche les ilusiona.
“A ver si nos aguanta un poquito así...”, dice un palmero. Los vecinos de La Palma afrontan la vida ahora con otro ánimo. Los expertos apoyan el optimismo reinante pero habrá que seguir atentos a sus últimos coletazos del volcán de Cumbre Vieja. “La idea es que no es descartable pequeñas reactivaciones momentáneas...” –explica el científico Vicente Soler- antes de la extinción definitiva.
El Plan de Emergencias Volcánicas y el Instituto Geográfico Nacional advierte de que señala que son necesarios al menos 10 días de actividad nula para dar por concluida la erupción del volcán.