La líder regional de Más Madrid, Mónica García, ha trasladado este martes que es preferible que concurran a las elecciones los tres partidos de izquierda por separado y avisa de que las mujeres están ya cansadas de "hacer el trabajo sucio" para tener "que apartarse en los momentos históricos". Ha ido más allá en una dura crítica al macho alfa Iglesias, y ha dejado claro que la política no es una serie de Netflix.
"Quiero presentarme a las elecciones y ser la próxima presidenta de la Comunidad de Madrid. Me apetece, tengo buenas ideas y mucho trabajo a la espalda", ha lanzado García en un vídeo difundido a los medios de comunicación.
"A la irresponsabilidad de Ayuso de convocarnos a unas elecciones una pandemia no podemos sumarle ni más frivolidad, ni más espectáculo, ni más testosterona", ha dicho García en declaraciones remitidas a los medios, después de que Iglesias ofreciera al partido de Íñigo Errejón la posibilidad de concurrir juntos a las elecciones.
Nadie pensaba que los abrazos rotos entre Iglesias y Errejón se solucionaran ahora, y más cuando Iglesias ve a Podemos estrellarse en las encuestas que le indican que en Madrid podría desaparecer y en el ámbito nacional, caer. Por eso si abrazo es tan envenenado como fatuo que se quiera vender para luchar contra el fascismo. Lo que quiere Iglesias es evitar quedarse sin partido y para eso Errejón no iba a ser el aliado. Y menos teniendo más votos que Podemos en Madrid.
Así que el líder de Más País, Íñigo Errejón, ha apostado por dar la batalla a su anterior compañero de partido en Podemos y ahora rival electoral, Pablo Iglesias, al rechazar su ofrecimiento para ir en una lista conjunta en las elecciones de la Comunidad de Madrid del 4 de mayo.
Iglesias dinamitó el lunes el tablero político al anunciar en un vídeo remitido a los medios que dejaba su cargo de vicepresidente de Gobierno para ir como candidato de Unidas Podemos en las elecciones madrileñas y así tratar de arrebatar el poder a Isabel Díaz Ayuso.
En el mismo vídeo propuso a Más Madrid (la marca de Íñigo Errejón en la capital y la Comunidad) concurrir en una única candidatura, e incluso se mostró abierto posteriormente en una entrevista a no encabezarla él si había pacto. El golpe de efecto lo ha dado este martes el partido de Errejón al rechazar este ofrecimiento usando también como medio de difusión un vídeo.
"A la irresponsabilidad de Ayuso de convocarnos a unas elecciones en plena pandemia, no podemos sumarle ni más frivolidad, ni más espectáculo, ni más testosterona", ha dicho en el vídeo la candidata de Más Madrid, Mónica García, en una clara alusión a Iglesias. En la misma línea, Errejón ha comentado en Twitter que el feminismo les ha "enseñado" que los hombres no siempre tienen que ser "los protagonistas".
Tras el no de Más Madrid, Iglesias ha expresado su "máximo respeto" por la decisión, aunque considera que habrían despertado "mucha ilusión con una candidatura unitaria", y ha apostado por "salir con todo para frenar a los ultras y ganar Madrid".
Los partidos de Errejón e Iglesias volverán a ser rivales electorales como ya ocurrió en las elecciones de la Comunidad de Madrid de 2019, cuando se consumó el divorcio entre ambos con la creación de Más Madrid. Sin embargo, en ese momento fue el propio Errejón el que se presentó como candidato a la Comunidad haciendo tándem con Manuela Carmena en el Ayuntamiento de la capital, y Podemos tuvo que montar a contrarreloj una lista electoral propia en la Asamblea de Madrid tras la salida del partido de su cofundador.
El próximo 4 de mayo los papeles se invierten y es Iglesias el que abandona la política nacional para batallar por la Comunidad de Madrid, donde el terremoto desatado por la ruptura del Gobierno de coalición de PP y Ciudadanos sigue teniendo réplicas.
Una de las consecuencias son las bajas en Ciudadanos, como las de los diputados de la Asamblea de Madrid Sergio Brabezo y Marta Marbán, que han anunciado este martes que dejan el partido ante su "deriva" y han acusado al exvicepresidente Ignacio Aguado de "presionar" al grupo parlamentario para firmar una moción de censura contra Ayuso que lo proponía como sustituto. El portavoz de Cs, Edmundo Bal, ha negado tanto las presiones para presentar una moción como la intención de romper el Gobierno con Ayuso.
Aguado no se ha pronunciado al respecto y ha seguido cargando contra la que hasta ahora era su socia, al decir que se ha comportado como una "pirómana" al convocar elecciones anticipadas y que Iglesias acude ahora "al olor a gasolina".
Por su parte, la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís (Cs), que mantiene su Gobierno de coalición con el PP en la capital, ha restado importancia a las salidas de compañeros del partido al decir que "cada uno puede hacer lo que quiera", y ha dicho que es "mentira" que detrás de estos casos esté maniobrando el exlíder de la formación Albert Rivera.
La crisis interna de Ciudadanos lo sitúa en un punto de partida muy complicado para las elecciones en la Comunidad de Madrid, para las que además no cuenta con ningún candidato todavía, aunque Aguado ya ha anunciado que se presentará a las primarias.
El PP sigue planteando esta cita electoral como un cuerpo a cuerpo contra Unidas Podemos y ha trasladado la batalla política a los tribunales al denunciar a Iglesias ante la Junta Electoral Provincial de Madrid por "vulnerar los principios de neutralidad, imparcialidad e igualdad" en el vídeo en el que anunció su candidatura.
Según la denuncia, el anuncio de Iglesias vulnera el artículo 50.2 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General, que establece que desde que se convocan elecciones hasta que se celebran "queda prohibido cualquier acto organizado o financiado, de forma directa o indirectamente, por los poderes públicos que contenga alusiones a las realizaciones o a los logros obtenidos".
Vox y PSOE han ejercido este martes más bien como espectadores de la contienda política entre Podemos y Más Madrid por un lado y Podemos y PP por otro. Mientras tanto, los plazos ya empiezan a correr: desde este martes los partidos tienen cinco días para registrar sus hipotéticas confluencias y quince para presentar sus listas electorales.
En las elecciones del 4 de mayo están llamados a votar 5.112.658 personas, de las cuales 4.783.528 residen en la Comunidad de Madrid, según datos oficiales del INE, y los más de 300.000 residentes en el extranjero deberán solicitar su voto hasta el 5 de abril.