La actividad del volcán de La Palma esta noche ha sido muy explosiva. Tanto que se ha abierto una tercera boca de la que emana lava muy líquida. Preocupa que esta lava pueda abrir un nuevo camino y arrase más construcciones en su trayecto.
De la nueva fisura sale mucha cantidad de lava, muy líquida y caliente. Aunque está en la misma zona que las bocas anteriores, en la cara norte, los vulcanólogos muestran su preocupación por que el magma que sale de esa nueva boca busque un recorrido distinto.
Si lo hace afectará a nuevas zonas en la isla de La Palma y podría arrasar nuevas viviendas. Hasta ahora la lava ha engullido casi 1.000 edificaciones.
Los vulcanólogos esperan que la colada que sale de esta nueva boca se reconduzca por la lengua que ya discurre hasta el mar hasta formar el delta. De no hacerlo, podría discurrir bordeando la parte Norte de la Colada principal hasta el mar.
La nueva boca se ha generado por un colapso del cono secundario, un proceso normal en un volcán en erupción.
Los expertos que estudian de cerca la erupción del volcán de La Palma vigilan más intensamente la calidad del aire después de que ayer se detectara un aumento del dióxido de azufre.
Aunque los niveles detectados desde ayer no son aún peligrosos para la salud, las autoridades mantienen las recomendaciones para la población y los confinamientos. Se insiste en el uso de mascarilla para salir a la calle.
Además preocupa que cambien la dirección del viento y que la nube tóxica que se forma cuando el magma entra en contacto con el mar se dirija hacia el interior de la isla, y no hacia el océano atlántico como hasta ahora.