Irene Montero y el jolgorio de los jueces ante las violaciones grupales

  • Irene Montero ha dejado claro en Informativos Telecinco con Pedro Piqueras que hay un problema no con la ley sino con su aplicación

  • Irene Montero es consciente del dolor de las víctimas pero señala a una parte de los jueces como responsables

  • Entrevista íntegra a Irene Montero

Irene Montero, ministra de Igualdad, ha demostrado en su cara a cara ante Pedro Piqueras en Informativos Telecinco que está dispuesta a negociar aspectos de su ley tal y como le pide el PSOE. No ve otro final que el acuerdo. Lo que no ha explicado es por qué. Aunque ha dado titulares.

A tenor de sus palabras, y pese a decir que es "muy consciente del dolor y de la indignación de las víctimas por las decisiones judiciales y la bajada de penas" -ojo, señalando claramente como culpables a una parte de los jueces en este lamento- , ha vuelto a defender una ley a la que no ve pegas. Sí, una. La interpretación que los jueces hacen de la misma. Ese es, según Irene Montero, el gran pecado capital que está posibilitando rebajas de penas y salidas de las cárcel a agresores sexuales y violadores.

De hecho la ministra se ha preparado bien esa argumentación recordando la ley contra la violencia de género de 2004. "Es lo mismo en los primeros años de la ley contra la violencia de género cuando aumentaron un 158% los sobreseimientos porque los jueces decían que no había indicios. Hubo 187 jueces que plantearon cuestiones de inconstitucionalidad a sabiendas que eso dejaba años a las víctimas sin protección adecuada. Cuando hay leyes en favor de las mujeres hay resistencias, hay jueces que han visto jolgorio en violaciones grupales y abusos cuando había violación". Y ese cree que es el problema al que se enfrenta su ley y el motivo de las excarcelaciones y rebajas de penas que ha provocado.

Al menos, la ministra de Igualdad no cree que todos los jueces vayan en contra de su ley. "Son algunos, porque la mayoría están aplicando bien la ley y no están bajando las penas. Los jueces que están bajando penas con esta ley son una minoría. No se puede decir que la ley está mal, hay un problema de aplicación, no de la ley como ocurrió con la ley de violencia de género en 2004", ha reiterado. La pregunta es entonces. Por qué se va cambiar.

Hay un problema de aplicación no de la ley

E Irene Montero ha apuntado entonces al PSOE, al que como dice Belarra le tiemblan las piernas por la presión a la que está sometido. La ministra ha vuelto a señalar a derecha judicial como responsable de la bajada de penas y la excarcelación de violadores y señala que el PSOE está siendo sometido a una gran presión por parte de la derecha mediática, política y judicial.

Lo que sí ha reconocido Irene Montero es que existe una "discrepancia fuerte" con el PSOE por la futura reforma de la ley de 'solo sí es sí'. La ministra de Igualdad ha confesado que esa tensión "existe", pese a que la parte socialista ha asegurado que el consentimiento no se tocará. En su entrevista a Informativos TelecincoMontero ha apuntado que está "abierta a retocar la ley, pero no el consentimiento", ante una reforma de la que dice haber presentado ya "cinco propuestas diferentes".

"Las mujeres no tenían respuesta del Estado hasta la ley del sí es sí"

En su entrevista con Pedro Piqueras, Irene Montero ha dejado claro que hasta su ley del sí es sí, las mujeres no tenían la protección por parte del Estado. Todo era impunidad, silencio y la normalización de las agresiones. Las mujeres no estaban protegidas porque se tenían que probar las violaciones con las heridas en el cuerpo. Si no te habías resistido nadie te creía, según Irene Montero. Ahora, su ley protege al 8% de las mujeres que denuncian y al 92% de las que no.

Irene Montero cree que su ley es resultado del 'hermana yo sí te creo'. Y ha vuelto a señalar que nada va a tocar el consentimiento -los jueces dejan claro que el consentimiento ha sido siempre el centro capital de las penas, porque con consentimiento no hay delito-. No lo ve así Irene Montero, que cree que hay resistencia en la defensa de las mujeres en la judicatura. De hecho, antes de la ley del sí es sí no cree la ministra que el Estado diera respuesta a las mujeres. "Ahora se las protege sin que pongan denuncia".

Dice Irene Montero que su ley es más punitiva que la anterior y que el problema es la interpretación de los jueces. Ha negado también haberles llamado machistas, "solo he dicho que hay sesgos" y sigue convencida de que el fondo del problema es que hay resistencia a creer a las víctimas. Irene Montero ha planteado en este caso una realidad antes de su ley en la que las mujeres iban a los pisos de los hombres y podían ser violadas ante la respuesta del 'a lo mejor te gustaba' de algunos.

No ha tenido respuestas a las consideraciones de Manuel Carmena, entre otras, que han criticado que se señale a la justicia. Como le ha comentado Pedro Piqueras, las críticas también han venido desde la izquierda. Habló Carmena de soberbia infantil. Irene Montero no ha querido entrar en esa batalla contra la izquierda -porque es la derecha la que boicotea su ley, según su punto de vista- y ha contestado así: "No debo dedicar a responder ni un minuto, creo que no se corresponden la dureza de las críticas con la falta de propuestas. Nadie ha sabido decir lo que está mal de la ley del sí es sí y la propuesta es la del PP para volver a la ley anterior. Ahora las mujeres pueden llamar al 016 y se va a encontrar con una psicóloga especializada y asesoramiento gratuito y se les van a informar de sus derechos. Pararemos esta ofensiva contra la ley en el ámbito judicial. Hasta ahora la violencia contra la mujer permanecía en silencio, en la impunidad y normalizada. A partir de ahora si no hay consentimiento habrá agresión sexual". Irene Montero lo tiene claro. La culpa, no es de su ley.