Hoy los presidentes de España y Francia, Pedro Sánchez y Emmanuel Macron, respectivamente, sellarán el primer Tratado de Amistad y Cooperación entre ambos países. Un acontecimiento histórico para el que se ha elegido Barcelona –con sus protestas independentistas incluidas- como escenario y en el que el aumento de las conexiones energéticas y la reapertura de pasos fronterizos están sobre la mesa.
La cantidad de ministros que acompañan a los dos presidentes hoy en la Ciudad Condal evidencia la importancia que tiene este tratado bilateral. Junto a Pedro Sánchez estarán las tres vicepresidentas del Gobierno y los titulares de Exteriores, Defensa, Interior, Transporte, Agricultura, Educación y Cultura.
En una jornada maratoniana de reuniones, sobre la mesa de Pedro Sánchez, Emmanuel Macron y sus ministros estarán las conexiones eléctricas que España quiere aumentar para poder exportar energía al resto de Europa. Es lo que viene siendo el proyecto H2MED, el primer corredor de hidrógeno renovable de la UE.
España quiere más recursos para exportar energía eléctrica a Europa, ahora que la guerra de Ucrania ha provocado una crisis con la subida del precio del gas. Sin embargo, Francia no lo ve tan necesario. Como productor de energía nuclear teme que la electricidad que se pueda exportar desde la Península Ibérica sea una fuerte competencia.
No obstante, Moncloa ha señalado que se está hablando de interconexiones de todo tipo, tanto energéticas como ferroviarias y rodoviarias. En cuanto, al proyecto de corredor de hidrógeno verde H2MED –dice- no habrá novedades, ya que se está a la espera de que la Comisión Europea decida si financiará parte del mismo.
Otro de los temas de interés es el de los pasos fronterizos cerrados por Francia. El Gobierno insiste en que se reabran cuanto antes y así se lo ha venido trasladando a Francia, pero en París no lo ve posible.
Fuentes del Elíseo han confirmado que aún hay nueve pasos secundarios con España clausurados y han precisado que la amenaza terrorista por la que se cerraron persiste, como también les preocupa el problema de los movimientos secundarios de inmigrantes.
A la cita en Barcelona ha sido invitado el president de la Generalitat, Pere Aragonés, que confirmó su asistencia a la par que ERC convocó manifestaciones para reivindicar la independencia catalana.
A las reivindicaciones organizadas por el Consell de la República (CdRep), ANC, Òmnium Cultural y otras 30 entidades independentistas, que han llamado a movilizarse cerca del MNAC, donde es la cita entre los dirigentes políticos, bajo el lema '¡Aquí no ha acabado nada! Independencia, Països Catalans, basta represión'.
A ella asisten, Oriol Junqueras, -que ha sido abucheado al grito de "traidor" y la secretaria general adjunta y portavoz, Marta Vilalta. También estarán la vicepresidenta del Parlament en funciones de presidenta, Alba Vergés; la expresidenta Carme Forcadell, y el alcaldable por Barcelona, Ernest Maragall, entre otros diputados y miembros del partido, pero no está previsto que asistan consellers del Govern.
Moncloa ha señalado que no hay ningún encuentro formal adicional entre Pedro Sánchez y el jefe del Govern, cuyo papel en el evento será el mismo que se ha reservado a otros presidentes autonómicos y responsables locales en cumbres de este tipo con otros países en otras ciudades. No obstante, los dos han conversado durante cinco minutos mientras esperaban la llegada del presidente francés. Aragonés, tras abandonar la cumbre antes de que sonaran los himnos nacionales de España y Francia, ha dado una rueda de prensa en la que no ha querido entrar en detalles sobre la conversación informal con Pedro Sánchez.
La elección de Barcelona como lugar para la cita bilateral es justificada desde España por la importancia que tendrá para la ciudad las interconexiones energéticas y demás asuntos a tratar y desde Francia por la cantidad de franceses que residen en ella.