Dejamos atrás un julio en que las precipitaciones han escaseado en muchos puntos de España y en la vecina Francia y en que la reserva de agua está claramente por debajo de la media. Y lo hacemos con una previsión poco esperanzadora. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el trimestre agosto-septiembre-octubre será cálido y seco si comparamos con los datos del periodo de referencia (1981-2010).
Todavía nos recuperamos de la primera ola de calor del verano que ha dejado valores muy altos en el norte de España, como los 41,5ºCde Bilbao o los 42,2ºC de Hondarribia, un récord absoluto que no se registraba en esta localidad guipuzcoana desde 1955. Lo hacemos con la vista puesta en los mapas de predicción por la posible llegada de la segunda ola de calor del verano apenas una semana después.
Lo que está claro para la Aemet es que, en conjunto, entre agosto y octubre las temperaturas no van a ser las que cabría esperar para los meses octavo, noveno y décimo del año. Aunque no lo ve tan claro en zonas del norte. Puede que Galicia, las comunidades del Cantábrico, Castilla y León y La Rioja se queden en valores más normales, aunque la probabilidad por ahora es exactamente la misma que para cualquiera de los otros escenarios (que el trimestre sea más frío o más cálido que la media).
En cuanto a las lluvias, prevé “una mayor probabilidad de que la precipitación se encuentre en el tercil inferior en toda España”. Esto quiere decir que es más probable que veamos llover menos que otros años, mientras que el tercil superior indicaría que llovería más que la mayoría de registros del mismo periodo.
No hay que olvidar que octubre está entre los tres meses más lluviosos del año en prácticamente toda España, con algunas excepciones. Generalmente, en octubre cae entre el 8 y el 16% de la precipitación anual. Por su parte septiembre es muy húmedo en el litoral mediterráneo en parte por las temidas ‘gotas frías’, ya que el mar se calienta mucho durante el verano. A pesar del agua que por suerte cayó durante la cuarentena (entre marzo y junio), lo cierto es que la reserva de agua en España se encuentra alrededor de un 8% por debajo de la media de los últimos 10 años, con 4 mil hectómetros cúbicos menos.