Los expertos que presagiaron un invierno meteorológico más cálido de lo normal en Europa parecen haber dado en el clavo por ahora. La entrada en nuestro país de la histórica borrasca Gloria que ha dejado consecuencias para el recuerdo ha resultado un 'break' antes de volver al anticiclón que nos trae, de nuevo, temperaturas más elevadas de lo normal. A nosotros, y a toda Europa. Una masa de aire cálido africano nos tiene desde el sur hasta Escandinavia con temperaturas hasta 12ºC más altas de lo normal para la fecha. En su parte oriental, eso sí, por poco tiempo: la semana que viene el Este pasará en 48 horas de un calor anómalo a los bajo ceros generalizados. ¿A qué se debe esto?
Las ondulaciones o meandros que presenta de manera constante el chorro polar están dando lugar a unos contrastes muy pronunciados que se suceden en Centroeuropa con envistes fríos seguidos de calor relativo. De hecho, hace tan solo unas semanas, en España se registraron valores más fríos que en Escandinavia, aquí por debajo de los 0ºC y allí superando los 7ºC, algo muy poco común. Y esta ha sido la tendencia desde que comenzó el mes de enero.
Sin embargo, todo podría cambiar en los próximos días. El anticiclón que ahora mismo está estancado en el sur del continente europeo -y que está provocando que las borrascas pasen por latitudes más altas-, va a ir alejándose poco a poco para abrir paso al frío y la inestabilidad. Según el modelo GFS, del 4 al 6 de febrero los valores van a dar un bajón extraordinario por el descuelgue de una depresión que arrastrará aire muy frío en altura (a 850 hPa) hacia Europa oriental, de origen polar. No parece, eso sí, que vayamos a asistir por el momento a una nueva 'Bestia del Este', como la que dejó entre 12ºC y 16ºC bajo cero a Suiza o Italia, aunque probablemente se queden cerca entre el jueves y el viernes.
Asimismo, este fenómeno podrá dejar lluvias más cuantiosas que, con mayor incertidumbre, se espera que puedan extenderse por países como Austria, Ucrania o el norte de Italia. En las imágenes de los mapas se puede apreciar a la perfección el cambio sustancial que se va a dar en tan solo 48 horas en la mayor parte de los países del este, lo que obligará a sacar todas las capas de abrigo posibles en muchas zonas.
Por su parte, el modelo ECMWF coincide en el desplome pronunciado de los termómetros , de hasta 10ºC menos que en días anteriores. Lo asocia más bien a una vaguada que probablemente se ondule sobre Grecia y que, estiman, no tendrá ningún efecto en nuestro país. Aunque no son previsiones del todo concluyentes, lo que está claro es que a partir del miércoles el este de Europa pasarán, al fin, mucho frío. Por ende, se podrán registrar bajo ceros en muchos países del norte europeo y lo más probable es que veamos heladas y nevadas contundentes.
En nuestro caso, nos queda por delante un fin de semana primaveral, con valores que van a superar los 25ºC de máxima en puntos del Levante y Andalucía, así como en Canarias. Lo más probable es que tengamos que esperar un poco más para experimentar de nuevo bajo ceros. Hasta el martes, según estima la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), no sentiremos el primer bajonazo de los termómetros.
El modelo europeo ECMWF, con mayor incertidumbre, no predice la llegada del frío a España hasta el domingo 9 de febrero, momento en que una masa polar se podría colar en la Península, arrastrando aire frío y húmedo a su paso. Aún con mucha incertidumbre por delante, lo único que sabemos con certeza es que nos esperan días bastante más calurosos de la media.