El invierno vuelve a España tras varios meses de paréntesis primaveral. La formación de una Dana (Depresión Aislada en Niveles Altos) con aire polar va a provocar un episodio de lluvia, viento y frío que será intenso en varias comunidades autónomas. A partir del jueves, estará activo la alerta por nieve en zonas de montaña de toda la Península. Estas serán las zonas afectadas.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé para hoy miércoles el paso de dos frentes atlánticos que dejarán precipitaciones en varios puntos de la mitad norte peninsular. El segundo recorrerá Galicia, Asturias y noroeste de Castilla y León durante la tarde y la noche causando chaparrones y tormentas, con fuerte viento en algunas zonas. Las temperaturas máximas descenderán además en casi toda la mitad norte peninsular.
Está será la "antesala" del cambio de tiempo que se espera a partir del jueves, según ha indicado Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.
Los cambios llegarán el jueves. El frente que entraba por Galicia el día anterior atravesará la Península de noroeste a sureste, dando lugar a precipitaciones en amplias zonas de la mitad norte peninsular y en menor medida en el sur y en el este, sin descartar que también podrán llegar las lluvias a Baleares. Podrían ir acompañadas de tormenta en el interior del sureste peninsular el jueves por la tarde.
Según el meteorólogo de la Aemet, lo "más destacado" será la entrada de una masa de aire frío tras el paso del frente, que hará descender notablemente las temperaturas de manera generalizada y traerá nieve a las montañas, e incluso a zonas altas de la meseta norte. Nevará a partir de los 700-800 metros en las sierras de Guadarrama y Somosierra, Pirineos o la cordillera Cantábrica, y a partir de los 1.000 metros en Sierra Nevada.
La Aemet ha activado el aviso amarillo -riesgo moderado- por nevadas copiosas el jueves en zonas montañosas de Aragón (sobre todo en la provincia de Teruel y en el Pirineo oscense), de Asturias, Cantabria, Castilla y León, norte de Castilla-La Mancha, Madrid y La Rioja, y el viernes también en Navarra, la Comunidad Valenciana (interior de Castellón y Valencia) y Cataluña (Pirineo de Lleida y Valle de Arán).
Para finales del jueves, e inicios del viernes, 4 de marzo, se desarrollará un baja mediterránea que incrementará la inestabilidad y producirá precipitaciones en la mitad oriental peninsular y en Baleares, que podrían ser localmente fuertes o persistentes. Las precipitaciones irán disminuyendo a lo largo del día. Las temperaturas seguirán bajando en el norte y este peninsular y en Baleares, manteniéndose la cota de nieve en niveles parecidos a los del día anterior.
El viento será de componente norte con intervalos de fuerte, sobre todo en zonas de montaña y en el Mediterráneo. Habrá aviso por viento en el este de Andalucía, en el entorno del sistema Central en Ávila, Segovia y Madrid, y en Melilla, y por fenómenos costeros adversos en las costas del Mediterráneo y de Galicia.
El viernes será un día frío y "plenamente invernal", con temperaturas entre 5 y 10 grados "inferiores a las normales para la época". De madrugada, habrá heladas en buena parte de la mitad norte y de día no se llegará a los 15 grados en amplias zonas del interior.
En Pirineos, el aviso por nevadas podrá seguir vigente el sábado y domingo, 5 y 6 de marzo, y los acumulados podrán alcanzar el metro de altura en las cumbres. En la cordillera Cantábrica, caerán en torno a 30-40 cm mientras dure el episodio, así como en la sierra Ibérica y el sistema Central.
A lo largo del fin de semana, las temperaturas mínimas serán gélidas, pero las máximas se irán recuperando. Las lluvias cesarán en gran parte de España, no obstante todavía serán probables en Galicia y otras zonas del extremo norte, así como en el área mediterránea, donde serán más probables cuanto más al sur. La cota de nieve se mantendrá en torno a los 1.000 metros en montañas del norte y del centro, aunque tenderá a ascender desde el domingo.
En Canarias, las temperaturas máximas superarán los 20 ºC el fin de semana, pero no se descartan lluvias en el norte de las islas montañosas durante todo el periodo.
El episodio de precipitaciones no será suficiente para paliar la sequía que atraviesa España, pero ayudará a llenar ligeramente los embalses, que actualmente se encuentran un 20 % más vacíos que el año pasado por esas fechas.