En las últimas horas, el huracán impronunciable Genevieve se ha intensificado como estaba previsto, hasta convertirse en un ciclón de alto impacto y el más fuerte de 2020 por ahora. La más afectada será la región de Baja California, que se encuentra en la costa del Pacífico de México. Mientras tanto, como si de un sándwich se trata, al otro lado, en el Atlántico, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) no quita ojo a la posible tormenta tropical Laura y quién sabe si nombrará también a Marco. Se avecinan días inestables en Centroamérica.
El NHC, por sus siglas en inglés, lo viene avisando varios meses: la temporada de huracanes en el Atlántico será muy intensa entre mediados de agosto y mediados de septiembre. Pero, en lo que se forman las próximas tormentas tropicales en las proximidades del Caribe, el protagonismo lo está acaparando Genevieve.
El huracán se convirtió el martes en el segundo de categoría 4 de 2020, después de Douglas, que amenazó Hawái hace unas semanas, pero finalmente se debilitó y su impacto fue menor al previsto.
El último comunicado del NHC informa de que Genevieve mantenía a primera hora del miércoles vientos máximos sostenidos de más de 180 kilómetros por hora, con rachas que alcanzaban los 220 km/hora. Así se veía desde el aire su ojo:
*Ojo del huracán Genevieve / NOAA / Giphy
Aún no ha tocado tierra, pero se encuentra a apenas 400 kilómetros del Cabo San Lucas, el pico más al sur de la península de Baja California, donde se irá acercando a lo largo del miércoles e impactará como muy tarde el jueves. El viento, las olas y las lluvias podrán generar incidentes graves. Después irá ascendiendo y, según ha informado The Weather Channel, “podría llevar a un aumento en las posibilidades de tormentas eléctricas en el terreno más alto del sur de California y Arizona”.
Mientras tanto, la imagen en el Atlántico es la siguiente, con una cruz naranja que, según el NHC, llegará a finales de esta semana al noroeste del Mar Caribe. Por otro lado, vemos otro futuro ciclón tropical (cruz roja) para el que el pronóstico del NHC es el siguiente: “Las condiciones ambientales son propicias para más desarrollo, y se espera que se forme una depresión tropical durante el día siguiente o a las 48 h, mientras el sistema se mueve hacia el oeste-noroeste”. El siguiente nombre a tachar en la lista de tormentas de la temporada 2020, después de Kyle sería Laura, al que le seguiría Marco si ambos sistemas se intensifican.