El primer huracán de la temporada de 2020 en el Atlántico, Hanna, ha arrasado zonas del estado de Texas y varios distritos del norte de México, entre ellos Monterrey. Las riadas han sido catastróficas, arrastrando personas y coches e inundando hospitales como el Doctors Hospital de las imágenes. Los vecinos se recuperan ahora de los estragos de la tormenta en medio de la pandemia.
Cuando Texas sobrepasaba por primera vez los 5.000 nuevos casos en un solo día, Hanna empezó a gestarse en el Atlántico. Aunque parecía que la tormenta tropical Gonzalo le robaría el puesto de primer huracán de la temporada, finalmente fue el ciclón con nombre de mujer el que fue intensificándose hasta alcanzar la categoría 1 con vientos de más de 120 km/hora y, sobre todo, mucha humedad.
Por su parte, México está entre los cinco países con más fallecimientos por coronavirus de todo el mundo. Julio no está siendo un buen mes, y sin duda Hanna no lo ha puesto fácil. El fenómeno de más virulencia han sido las lluvias. Las inundaciones han dejado dos muertos y cuatro desaparecidos en las regiones limítrofes con Estados Unidos. El agua recorría las calles con tanta intensidad que volcó camiones, y los cortes de electricidad han afectado a miles de hogares y edificios. Se han tenido que establecer refugios temporales.
El segundo huracán podría no tardar en llegar. Esta vez, eso sí, el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) no lo ve tan claro. Parece que Isaias podría quedarse en ciclón tropical sin adquirir la categoría 1. En caso contrario, si se observa una organización de sus vientos en su aproximación a las Islas de Barlovento del Caribe, se emitirá una alerta, entre otras, en Barbados, pudiendo llegar a Puerto Rico.