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El paso de una vaguada atlántica con aire frío que atraviesa la península dejará este martes chubascos y tormentas localmente fuertes y con granizo en zonas del nordeste y un descenso notable de las temperaturas máximas en zonas del tercio norte, mientras cuatro comunidades siguen en alerta por calor. Aemet alerta de que las zonas más afectadas serán el Sistema Ibérico medio, el alto Pirineo y en el oeste de Cataluña. El granizo y las fuertes tormentas van a ser habituales.
Este martes, la vaguada que afectó ayer a la Península Ibérica se desplaza hacia el centro de Europa, mientras se aproxima una nueva vaguada en niveles altos que va a afectar al nordeste peninsular y dejará precipitaciones que se desplazarán de oeste a este y afectarán a la zona mediterránea. Se registrarán chubascos y tormentas, que pueden ser localmente fuertes e ir acompañadas de granizo en zonas del Pirineo, prelitoral, litoral de Cataluña, amplias zonas de la Comunidad Valenciana, Mancha albaceteña, Cazorla y Segura y amplias zonas de la Comunidad de Murcia.
De forma menos intensa y probable, pueden afectar a otras zonas del centro y sudeste peninsular. Un frente frío llevará nubosidad y precipitaciones al Cantábrico y dejará un importante alivio térmico en la mitad occidental y en todo el tercio nororiental. En Aragón se registrarán precipitaciones y tormentas que pueden ser más intensas, con chubascos y tormentas localmente fuertes o muy fuertes y con granizo y que pueden afectar en menor grado a todo el norte y oeste de Cataluña, Ibérica castellana, La Rioja, Navarra, este del País Vasco y Maestrazgo (Teruel), sin descartar el litoral de Tarragona.
En esta jornada se encuentran en aviso naranja por tormentas con granizo probable y rachas fuertes de viento en Pirineo de Huesca, Cinco Villas (Zaragoza), ribera del Ebro, Ibérica de Zaragoza, bajo Aragón de Teruel; en Galicia y el Cantábrico habrá nubosidad abundante, y tormentas que afectarán a Huesca y Lleida y evolucionarán a nubes convectivas muy generalizadas en amplias zonas del norte, este y Baleares.
En Canarias se registrará un reforzamiento del régimen de alisios y un descenso paulatino de las temperaturas bajo la influencia del anticiclón de las Azores, con intervalos nubosos y en las montañas nubes de evolución con posibilidad de algún chubasco ocasional, mientras en el resto del país se prevé cielo poco nuboso, con nieblas en el Estrecho, Baleares, interiores del Mediterráneo y extremo norte.
Se registrará un descenso casi generalizado de temperaturas, de forma más acusada en las máximas, con descensos notables en el tercio norte, y con algunos aumentos puntuales en litorales de Andalucía, Melilla y medianías de Canarias y se superar los 36 ºC en los valles del tercio sur, puntos de Mallorca y zona sur de Canarias. Predominarán vientos de componente oeste en la península, rolando a noroeste, de componente sur en Baleares y poniente arreciando al final en el Estrecho y Alborán.
Mañana miércoles, el eje de la vaguada se mueve lentamente y se situará sobre Cataluña y Baleares, con un núcleo frío, manteniendo las condiciones de inestabilidad durante todo el día sobre todo en las comunidades mediterráneas. En el Cantábrico y en Meseta norte continúa el flujo frio y predominan condiciones de anticiclón en el cuadrante suroccidental, mientras en Canarias continúan bajo condiciones de alisio reforzado.
El jueves, la vaguada se habrá transformado en una depresión aislada en niveles altos (DANA) con estructura compleja y centro alrededor de Baleares, que dejará gran inestabilidad, chubascos y tormentas intensos acompañados de barro. Habrá fuertes chubascos en gran parte de la península.
La Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior alerta también por las lluvias intensas y tormentas en zonas de la mitad oriental peninsular y en Baleares, de acuerdo con las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Probablemente, las comunidades autónomas más afectadas serían Aragón, Navarra, La Rioja, Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares y la previsión actual es de acumulaciones que podrían alcanzar hasta 50 litros por metro cuadrado (l/m2) en una hora, y más de 100 l/m2 en dos o tres. Además, Protección Civil avisa de que existe también posibilidad de granizo y rachas muy fuertes de viento en las zonas con riesgo de tormentas. Aún así, aconseja a la ciudadanía mantenerse informada en todo momento ante el difícil pronóstico de los fenómenos tormentosos.
En lo que respecta a las lluvias intensas, la institución pide que, si se tiene que viajar, hay que procurar circular preferentemente por carreteras principales y autopistas. Asimismo, insta a disminuir la velocidad, extremar las precauciones y no detenerse en zonas donde pueda discurrir gran cantidad de agua.
En caso de tormentas súbitas y lluvias intensas, Protección Civil subraya la necesidad de tener en cuenta el lugar donde se aparcan los vehículos, dado que el rápido ascenso del nivel de las aguas puede dañar los vehículos aparcados sobre zonas inundables y, asimismo, arrastrarlos, provocando daños a bienes ajenos e incluso obstaculizar el flujo natural de la corriente.
Asimismo, el organismo insiste en pensar en el riesgo de inundación si comienza a llover de manera torrencial. Por ello, pide no atravesar con el vehículo ni a pie los tramos inundados, ya que una persona desconoce lo que puede haber debajo del agua. A su vez, insta a localizar los puntos más altos de la zona y no intentar salvar el automóvil en medio de una inundación. Por último, aconseja alejarse de los ríos, torrentes y zonas bajas de laderas y colinas si uno se encuentra en el campo, evitar atravesar vados inundados y, de nuevo, dirigirse a los puntos más altos de la zona.
Si bien Protección Civil admite que el peligro de las tormentas para las personas se produce, fundamentalmente, en campo abierto, recomienda colocarse cerca de los edificios para protegerse de los rayos en los núcleos urbanos. Además, pide evitar las corrientes de aire en las viviendas y sugiere el propio vehículo cerrado como bien refugio si uno va conduciendo. En este mismo sentido, si la tormenta sorprende en el campo, el organismo insta a no correr y permanecer en lugares elevados, como los altos de las colinas, crestas o divisorias, sin refugiarse bajo los árboles y alejándose de alambradas y objetos metálicos.
Ante los fuertes vientos, Protección Civil pide asegurar puertas, ventanas y todos aquellos objetos que puedan caer a la vía pública y alejarse de cornisas, árboles, muros o edificaciones en construcción o grúas que puedan desprenderse. A su vez, indica que conviene abstenerse de subir a los andamios sin las adecuadas medidas de protección.
En el caso de que las rachas le pillen a uno conduciendo, insta a extremar las precauciones, especialmente en la salida de túneles, adelantamientos y cruce con vehículos pesados en carreteras de doble sentido. Por esta parte, pide prestar atención ante la posible presencia de obstáculos en la carretera.
Por último, ante los vientos costeros, el organismo aconseja alejarse de la playa y de otros lugares bajos que puedan verse afectados por las elevadas mareas y oleajes que suelen generarse. A su vez, pide evitar estacionar los vehículos en zonas que puedan verse afectadas por el oleaje, ya que en estas situaciones el mar adquiere condiciones extraordinarias y puede arrastrarle si se encuentra en las proximidades del mar. Finalmente, insiste en pedir no poner en riesgo la vida ante las imágenes espectaculares del fuerte oleaje.
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