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La sequía en España amenaza ya la disponibilidad de agua dulce y el rendimiento agrícola. No llueve, y cuando lo hace no es suficiente para compensar los periodos de escasez, lo cual ha hecho que nuestros embalses se encuentren, según el último balance del Ministerio para la Transición Ecológica, al 41 por ciento de su capacidad. ¿Cuándo volverá la necesaria lluvia a nuestro país?
La escasez de agua ya pasa factura en muchas zonas de España. Las comunidades más afectadas por ahora son Cataluña y Andalucía, donde al menos 600 municipios tienen el consumo limitado y sufren cortes de agua de madrugada. En total, están sufriendo los efectos de la sequía este verano casi nueve millones de personas en nuestro país, con diferentes restricciones.
Hay zonas de Málaga donde las duchas de las playas están inutilizadas por la falta de agua, y de madrugada el grifo está de adorno, puesto que se han impuesto restricciones.
En el siguiente mapa del Gobierno podemos ver las zonas del país que sufren una “sequía prolongada” o meteorológica, que se produce por la falta de lluvias y deja en situación crítica los ríos y embalses.
Si hablamos de escasez o sequía hidrológica, relacionada con los posibles problemas de atención de las demandas, la situación es bastante más crítica. En el siguiente mapa se muestran las regiones que pueden sufrir problemas de abastecimiento, regadío, etc.
Venimos de un mes de julio sequísimo en España, a excepción del este peninsular y partes de Galicia. Y no parece que agosto vaya a poner fin a la sequía.
En lo que va de mes, apenas ha caído una gota en nuestro país. Únicamente se ha producido algunas precipitaciones en el área cantábrica y zonas de Galicia, así como Baleares, ocasionalmente. El acercamiento del anticiclón de las Azores está bloqueando el paso de borrascas y dando lugar, además, a episodios de calor muy extremos que favorecen la evotranspiración, es decir, contribuyen a secar más el suelo y la vegetación.
La próxima semana, parece que las precipitaciones volverán a brillar por su ausencia, aunque es cierto que los modelos meteorológicos apuntan a un trimestre de septiembre, octubre y noviembre ligeramente más húmedo que la media. Veremos a ver.
Antes, el año hidrológico (que terminará el 30 de septiembre) podría terminar con un déficit preocupante de las precipitaciones en España.