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Actualmente hay cinco incendios forestales activos en Cantabria, y en lo que llevamos de marzo la cifra asciende a 23. Con la llegada del calor y aire mucho más seco que el de días anteriores, cuando las lluvias ayudaron a mantener húmeda la vegetación, España se enfrenta a un importante riesgo de incendios en muchas zonas a partir de este viernes.
Adiós a la lluvia. Desde hoy, la llegada del anticiclón y aire procedente del suroeste, muy cálido y seco, va a traer tiempo mucho más estable, sin nubes y con viento en calma, salvo en el este peninsular, donde habrá ráfagas de más de 80 km/hora.
La mezcla de tiempo estable y aire mucho más cálido en altura va a hacer que las temperaturas se disparen en España este fin de semana, un ascenso que continuará el lunes de la próxima semana.
En prácticamente todo el país, las temperaturas llegarán a los 20 ºC, incluso podrán superarse los 22 ºC este viernes en Madrid, Barcelona o Asturias.
El sábado volverán a subir y muchas regiones del sur y del este peninsular, así como los archipiélagos, rondarán ya los 25 ºC en las horas centrales del día, y en el litoral mediterráneo, en ciudades de la Comunidad Valenciana y de Murcia, así como Málaga o Almería, llegaremos a los 30-32 ºC.
Don temperaturas más propias de junio que de marzo, ha indicado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Esto hará que se adelante un riesgo que generalmente llega con el verano: los incendios.
El mayor riesgo se producirá en las regiones del Mediterráneo, donde los vientos del oeste llegarán recalentados tras atravesar toda la Península. Al encontrarse con cadenas montañosas, se produce lo que se conoce como un efecto Foehn del viento, que hace que se seque y caliente a descender por las laderas de sotavento.
El viento además tenderá a acelerarse a su llegada a las regiones del este peninsular, por lo que la Aemet ha activado el aviso por rachas que podrán superar los 80 km/hora este viernes en Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y el este de Andalucía.
Se producirá así en las regiones del este peninsular lo que se conoce popularmente como la ‘regla del 30’, que significa que las temperaturas superarán los 30 ºC, las rachas de viento los 30 kilómetros por hora, y que la humedad ambiental relativa será inferior al 30 %.
Cuando se cumplen estos aspectos el riesgo de incendio es alto y las llamas pueden avivarse y extenderse rápidamente, lo cual complica mucho las laboras de extinción. Por ello es clave la prevención.
No se deben arrojar cigarrillos al suelo, encender fuego en el monte, hacer quemas sin la autorización oportuna, utilizar maquinaria agrícola que pueda causar un incendio, y se debe avisar de inmediato al 112 en caso de ver fuego.