Es de esperar que, en marzo, con la llegada de la primavera, los termómetros empiecen a subir en España. Pero el calor de esta semana va a ser más propio del verano: los últimos días podrá hacer más de 30 ºC en algunas provincias del sur y el Mediterráneo, así como las islas Canarias. Quienes planeen una escapada a la costa estarán de suerte, incluso se habla de posibles récords de temperatura.
El calor va a llegar por todo lo alto y además no lo hará solo: vuelve la lluvia, esa gran ausente. Con los embalses al 50 % de su capacidad, y pensando ya en cómo afrontaremos el verano, cuando la sequía suele traer problemas de abastecimiento en muchas localidades españolas, la previsión de precipitaciones es una estupenda noticia. Pero no lloverá en todo el país. En las comunidades más necesitadas, las del Mediterráneo, podría no caer ni gota.
"Esta semana dejaremos definitivamente atrás el frío", ha señalado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo. Las responsables del calor y las lluvias serán una serie de borrascas que circularán muy cerca de nuestro país, sin adentrarse de lleno.
Por tanto, las lluvias no serán generalizadas. Se esperan en Galicia y Andalucía, y no se descarta que se produzcan en otros puntos de la mitad oeste peninsular y en zonas de montaña. El miércoles, podrán ser fuertes también en el norte de Extremadura. En el Mediterráneo, por el contrario, brillará el sol.
Estas borrascas además impulsarán los vientos del oeste y suroeste, que son templados, por lo que las temperaturas subirán de forma clara, las heladas desaparecerán y la cota de nieve estará muy alta. Esos vientos templados traerán a su vez una masa de aire subtropical bastante cálida.
Los termómetros escalarán grados estos días, y el fin de semana tocarán techo. “Es posible que las temperaturas alcancen valores muy altos para la época del año más propios de mayo o incluso de junio en algunas zonas. Se superarán localmente los 30 ºC en puntos del área mediterránea peninsular”, dice Del Campo, y puede que en zonas de Andalucía y de las islas Canarias.
A partir del viernes se irán imponiendo las altas presiones y se estabilizará la atmósfera y, por tanto, las lluvias irán desapareciendo del territorio. Tan solo seguirá lloviendo ese día en el oeste de Galicia, puntos del extremo norte y de forma muy aislada y ocasional en regiones de montaña.
“En general predominarán los cielos poco nubosos y las temperaturas volverán a subir impulsadas por unos vientos del oeste y suroeste que transportarán aire muy templado que aún se calentará más con motivo de las altas presiones y por la orografía”, informa el portavoz de la Aemet.
De ese modo, en las horas centrales del día pasaremos de 18 a 20 ºC en prácticamente toda España; de 25 ºC en las regiones mediterráneas, donde incluso localmente algunas localidades no quedarán muy lejos de los 30 ºC. De hecho, el meteorólogo pronostica que el sábado y el domingo se podrá superar la barrera de los 30 ºC por ejemplo en Valencia, Murcia o Málaga.
Como decimos, no es un calor propio de primavera, sino más bien de verano. Los valores estarán entre 5 y 10 ºC por encima de la media para ésta época del año en buena parte del país, en algunas zonas hasta 15 ºC por encima.
En ciudades como Valencia podrían superarse los récords anteriores de temperaturas máximas para el mes de marzo. En la estación meteorológica de Valencia Aeropuerto, hasta ahora el valor máximo más alto se alcanzó el 25 de marzo de 1988, de 32,6 ºC. Por tanto no es descartable que superemos esa cifra.
En Murcia, la temperatura máxima absoluta hasta ahora para el mes de marzo es de 33,6 ºC, y se registró el 10 de marzo de 2017; en Málaga Aeropuerto, es de 31,4 ºC, registrados también en 1988, y en Morón de la Frontera (provincia de Sevilla), es de 30,8 ºC, en marzo de 2020. Estos son algunos candidatos a registrar récords de calor el fin de semana.