El polvo y las altas temperaturas nos están dejando un fin de semana bastante primaveral. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado de que las máximas de este domingo serán más propias de finales de abril o comienzos de mayo que del mes de febrero. Pero la semana que viene nos espera un cambio de tiempo: un frente traerá de vuelta la lluvia y la nieve.
El tiempo cambiará radicalmente en el ecuador de esta próxima semana. La llegada de un frente causará un temporal de vientos del norte, mucho más fríos y húmedos que los de estos días, procedentes de África, que son bastante secos y cálidos. Como resultado, las temperaturas bajarán y en gran parte de España tendremos que sacar el paraguas.
Durante la primera mitad de la semana del 20 de febrero se espera un tiempo variable, con posibles chubascos dispersos en diversas zonas de la Península, más probables e intensos en el cuadrante noroeste durante el martes, según la previsión de la Aemet.
Es probable que a partir del miércoles se produzca un cambio de tiempo con la llegada de un frente por el noroeste peninsular, que dejará precipitaciones en la mitad norte y favorecerá un descenso generalizado de las temperaturas, que durante el día siguiente se extenderá al litoral mediterráneo.
A partir del jueves la incertidumbre aumenta, pero es probable que continúe el tiempo inestable con precipitaciones que, dependiendo de los días, terminarán afectando a toda la Península, menos probables en Baleares.
Las temperaturas sufrirán oscilaciones, pero con tendencia a descender, con lo que las precipitaciones serán en forma de nieve principalmente en los sistemas montañosos.
Teniendo en cuenta la alta incertidumbre, no se descarta que las nevadas alcancen otras zonas más bajas de la mitad norte.
Los vientos soplarán en general flojos, predominando la componente oeste durante el miércoles, y girando a componente este a partir del viernes, con posibles rachas muy fuertes en zonas de montaña de la mitad norte.
En Canarias predominará un tiempo anticiclónico y estable durante la primera mitad de la semana, salvo en el norte de las islas de más relieve donde puede producirse precipitaciones asociadas a los vientos alisios.
A partir del jueves, es probable que la cola del frente afecte al archipiélago, extendiéndose las precipitaciones y favoreciendo un descenso de temperaturas.