Las tormentas de la borrasca Efraín descargaron en una hora y media hasta 26 litros por metro cuadrado de lluvia en Madrid este miércoles, lo cual supone la mitad del promedio del mes de diciembre. Esto causó inundaciones en estaciones de Metro y varios túneles, y formó numerosas balsas de agua en carretera que dificultaron la circulación.
A pesar de los colapsos en diferentes puntos de la capital, desde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) aseguran que las cantidades de agua vertidas por la borrasca Efraín en Madrid no eran suficientes para activar la alerta por lluvias, después de que el alcalde, José Luis Martínez Almeida, culpase al organismo las inundaciones.
En todo el mes de diciembre suelen caer en Madrid alrededor de 47 litros por metro cuadrado, según ha informado la Aemet.
Este miércoles, 14 de diciembre, caía la mitad de esa cantidad en cuestión de horas, con hasta 26 l/m2 en algunos observatorios meteorológicos de la red de la Aemet. No obstante, se trata de una cantidad insuficiente para activar la advertencia por posibles inundaciones, por lo que, durante el episodio de precipitaciones, se había desactivado ya el Plan de Actuación de Inundaciones del Ayuntamiento de Madrid (PAINUNAM).
En otras zonas de España, principalmente de Andalucía y Extremadura, los incidentes han sido incluso peores que en la capital.
Ha habido importantes destrozos e inundaciones en Cádiz, y en Jerez de la Frontera se formó lo que parecía ser un tornado. En Sevilla, el granizo y el viento ha causado graves estragos; en Ogíjares (Granada), varios conductores celebraban salir vivos de una riada, y se han producido desprendimientos en el Caminito del Rey de Málaga.
En Extremadura son docenas de vecinos los que han sido desalojados y probablemente no podrán volver a sus casas. Muchas personas lo han perdido todo. Además, se tuvieron que realizar cientos de rescates a conductores por las inundaciones repentinas en las carreteras.
En Castilla y León, un hombre podría haber fallecido tras ser arrastrado por una riada cuando se encontraba en su coche en Villarino de los Aires, Salamanca.
Este viernes, la borrasca Efraín, ya muy debilitada, se echará sobre la Península y causará lluvias en gran parte de España, salvo en zonas del interior norte y del este y Baleares, donde predominará el tiempo estable.
Continuarán en aviso amarillo las provincias andaluzas de Cádiz, Granada y Málaga; y, en Galicia, A Coruña estará en riesgo por fenómenos costeros, según ha informado la Aemet.
En el área cantábrica, Pirineos, noreste de Cataluña y cuadrante suroeste peninsular podría haber tormentas puntuales, aunque sin duda donde más lloverá será en el entorno del Estrecho y litorales de Alborán.
Las temperaturas bajarán de manera generalizada y la noche del viernes podría ser bastante fría en la mitad norte peninsular, aunque el domingo los vientos del sur provocarán un nuevo ascenso, por lo que no tardaremos en volver a los valores más altos de lo habitual.
El fin de semana tendremos un tiempo anticiclónico con cielos más despejados y sin lluvias en prácticamente toda España, aunque con abundantes bancos de niebla.