El huracán Orlene se fortaleció a categoría 4 este fin de semana a medida que se acercaba a la costa oeste de México, donde está a punto de tocar tierra con lluvias torrenciales, vientos muy fuertes y marejada ciclónica. ¿Qué pasará a continuación?
El acercamiento del huracán Orlene está causando lluvias torrenciales en el oeste de las regiones de Jalisco y Nayarit, e intensas en Colima y el sur de Sinaloa, en la costa occidental de México.
A las 16:00 hora local del domingo, el huracán Orlene se acercó a México con vientos máximos sostenidos de 185 kilómetros por hora (km/h), y rachas que alcanzaron los 220 km/h.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha emitido alertas para proteger a la población en las ciudades turísticas de Mazatlán y San Blas, donde se han suspendido las clases escolares y otras actividades.
La tormenta está a punto de tocar tierra, aunque se ha informado de un debilitamiento en las últimas horas a categoría 2, con vientos que todavía alcanzan los 170 km/h.
Se pronostica que Orlene se moverá sobre Las Islas Marías durante la noche y después avanzará hacia el sur de Mazatlán. Desde el Centro Nacional de Huracanes se ha activado la advertencia de huracán en Las Islas Marías y a lo largo de la costa de México continental desde San Blas hasta Mazatlán, así como desde Playa Perula hasta San Blas y desde Mazatlán hasta Bahía Tempehuaya, incluida la ciudad de Puerto Vallarta.
La temporada de huracanes en el Pacífico Oriental comenzó oficialmente el 15 de mayo, y finalizará en torno al 30 de noviembre. Hasta el momento, ha habido una actividad cercana al promedio, con 16 tormentas con nombre y 9 huracanes.
El primero fue el huracán Agatha en mayo, que tocó tierra en Oaxaca y causó al menos 9 muertos y dejó sin luz a unas 45.000 personas. Posteriormente se formaron el huracán Blas y la tormenta tropical Celia, que provocaron fuertes lluvias en el suroeste de México; el huracán Bonnie, que empezó a originarse en el Atlántico y viajó hasta el Pacífico, donde finalmente se intensificó; las tormentas tropicales Javier, Lester y Madeline, que causaron algunas inundaciones, y el peligroso huracán Kay, que afectó especialmente a Baja California Sur y Sinaloa con inundaciones.