Las buenas noticias sobre el incendio de Bejís no llegan. La madrugada del viernes ha sido desesperanzadora a pesar de la lluvia, dado que el intenso viento en el interior de Castellón ha reavivado varios focos. La magnitud es tal que el humo se está extendiendo por el Mediterráneo y llega a la isla de Formentera, y se queda a las puertas de Ibiza.
El humo generado por el incendio forestal de Bejís ha recorrido 200 kilómetros hacia el sureste hasta alcanzar la isla de Formentera.
El humo se puede apreciar desde el espacio, según una foto del satélite Sentinel-3 del programa espacial Copernicus de la Unión Europea y las imágenes del Meteosat. Según los mapas de Copernicus, el incendio de Bejís generó una nube de humo que cubrió casi toda la Sierra Calderona y el interior sur de Castellón y Teruel.
De hecho, el miércoles por la noche el olor a quemado se expandía por el litoral de València y Castellón, a más de 50 kilómetros de la zona.
En los mapas que ha publicado el satélite se observa cómo el fuego de Bejís ha afectado a una zona que se expande desde el Santuario de la Cueva Santa -entre Altura y Alcublas- hasta El Toro y cómo se ha quedado a las puertas de los núcleos urbanos de Bejís, Sacañet, Teresa y Torás.
Respecto a la evolución de la situación del incendio, el jueves se desalojaron las pedanías de Artaj, la Pobleta y Oset del municipio de Andilla, y se confinó a la población de Alcublas por la cercanía del humo del fuego. Todas estas localidades están en la provincia de Valencia.
El viento y el humo están siendo los "principales protagonistas" en la zona del incendio forestal, con la "dificultad añadida" que pueden ocasionar en las tareas de extinción, según explica el '112 CV'.
Según el último balance oficial, se habrían quemado ya más de 10.000 hectáreas, y más de 400 efectivos terrestres y 36 medios aéreos trabajan para apagar el fuego.