Una tormenta de granizo y lluvia afectó a primeras horas de la tarde a Albacete capital. Los coches aparcados en la calle sufrieron daños, y en la carretera la situación daba miedo. Los conductores se vieron en apuros en varios tramos de la A-30. Y el temporal no ha hecho más que empezar.
Lunas rotas, coches abollados y calles blancas por el granizo. Era la estampa el martes por la tarde en el centro de Albacete. La primera tormenta se dio alrededor de las 16 horas, pero lo peor llegó una hora después, con pedrisco aun más grande.
Los bomberos tranquilizan: no ha habido víctimas, tan solo daños materiales. Según los datos recogidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), cayeron alrededor de 8 litros por metro cuadrado en la capital, así como en otros puntos de la provincia. En Elche de la Sierra y Vicorto también se reportaron algunos daños.
Como consecuencia del temporal, las temperaturas se han desplomado hasta 10 grados en partes de Castilla-La Mancha, que también está viendo fuertes rachas de viento superiores a los 80 kilómetros por hora en otras provincias como Cuenca.
Este miércoles, el mayor riesgo se dará en la provincia de Teruel, donde caerán más de 30 l/m2 en tan solo una hora durante la tarde y puede caer pedrisco grande.
En total, hay una veintena de provincias en alerta por este temporal que viene causado por una Dana, una depresión aislada en capas altas de la atmósfera, que irá remitiendo a partir del jueves. De cara al fin de semana, el calor volverá a ser protagonista en España.
En lo que va de día, los efectos de las tormentas se están sufriendo especialmente en Calanda (Teruel), donde la cosecha de melocotón se está viendo muy afectada, y los agricultores temen que tan solo podrán salvar alrededor del 30 por ciento de la producción, con enormes pérdidas económicas. Los vecinos aseguran que han caído piedras de hielo de 4 centímetros, reventando todo a su paso.
En Cuenca, las fuertes rachas de viento han tumbado un poste de telefonía entero. En Ávila, los animales huían despavoridos del granizada buscando refugio donde podían. Por suerte, el episodio no tardará en remitir y la calma volverá a partir del jueves.